MODERADOR: Preside esta ceremonia de revista de entrada de la Guardia Nacional, el presidente constitucional de los Estados Unidos Mexicanos, licenciado Andrés Manuel López Obrador.

MODERADORA: Integran el presídium la doctora Beatriz Gutiérrez Müller, esposa del presidente de los Estados Unidos Mexicanos.

MODERADOR: General Luis Cresencio Sandoval González, secretario de la Defensa Nacional.

MODERADORA: Almirante José Rafael Ojeda Durán, secretario de Marina.

MODERADOR: Doctor Alfonso Durazo Montaño, secretario de Seguridad y Protección Ciudadana.

Diputado Porfirio Muñoz Ledo, presidente de la Mesa Directiva de la Cámara de Diputados.

Senador Martí Batres Guadarrama, presidente de la Mesa Directiva de la Cámara de Senadores.

Ministro Arturo Zaldívar Lelo de Larrea, presidente de la Suprema Corte de Justicia de la Nación.

General de Brigada Diplomado de Estado Mayor, Luis Rodríguez Bucio, comandante de la Guardia Nacional.

Doctor Alejandro Gertz Manero, fiscal general de la República.

Doctora Olga Sánchez Cordero, secretaria de Gobernación.

Integrantes del Gabinete Legal y Ampliado del Gobierno de México.

Distinguidos gobernadores y representantes de las entidades federativas del país.

Funcionarios de las secretarías de las Defensa Nacional y de Marina.

Agregados militares, navales y aéreos acreditados en nuestro país.

Representantes de medios de comunicación y público en general.

Reciban todos la más cordial bienvenida.

MODERADOR: El presidente constitucional de los Estados Unidos Mexicanos realizará la Toma de Protesta de Bandera a los integrantes de la Guardia Nacional.

PRESIDENTE ANDRÉS MANUEL LÓPEZ OBRADOR: Integrantes de la Guardia Nacional:

Vengo en nombre de la patria a encomendar a su valor, patriotismo y estricta disciplina esta bandera, que simboliza su independencia, sus instituciones, la integridad de su territorio y su honor.

¿Protestan honrar y defender con lealtad y constancia esta bandera?

VOCES A CORO: Sí, protesto.

PRESIDENTE ANDRÉS MANUEL LÓPEZ OBRADOR: Al concederles el amparo de su sombra y el honor de ponerla en sus manos, garantizo a la patria, con fundamento de las virtudes que les reconozco, que como buenos y leales integrantes de la Guardia Nacional sabrán cumplir su protesta.

MODERADORA: El licenciado Andrés Manuel López Obrador, presidente constitucional de los Estados Unidos Mexicanos, llevará a cabo el abanderamiento de la escolta de la Guardia Nacional.

(ABANDERAMIENTO DE LA ESCOLTA DE LA GUARDIA NACIONAL)

MODERADOR: El presidente de la República pasará revista a las unidades que integran la Guardia Nacional.

(PASE DE REVISTA)

MODERADORA: El general de Brigada Diplomado de Estado Mayor, Luis Rodríguez Bucio, comandante de la Guardia Nacional hará uso de la palabra.

LUIS RODRÍGUEZ BUCIO, COMANDANTE DE LA GUARDIA NACIONAL: Con su permiso, señor presidente.

Licenciado Andrés Manuel López Obrador, presidente de los Estados Unidos Mexicanos; señores presidentes de las mesas directivas de las cámaras de Diputados y Senadores del Congreso de la Unión; señor ministro presidente de la Suprema Corte de la Justicia la Nación.

Señora secretaria de Gobernación, señor secretario de la Defensa Nacional, señor secretario de Marina, señor secretario de Seguridad y Protección Ciudadana; señoras y señores titulares del Gabinete Legal y Ampliado, señor fiscal general de la nación, señora y señores gobernadores de los estados y jefa de gobierno de la Ciudad de México.

Señores generales, almirantes, comandantes de los mandos territoriales, militares, navales y de Fuerza Aérea; generales, almirantes, jefes, capitanes, oficiales, tropa y marinería presentes en esta ceremonia; comisarios, inspectores, oficiales, personal de escala básica de la Guardia Nacional y de la Policía Federal que participan en esta ceremonia.

Agregados de Defensa, militares aéreos, navales y de policía de diferentes países acreditados en México, estimados representantes de los medios de comunicación; señoras y señores:

Quiero empezar mis palabras con un agradecimiento al señor presidente de la República, licenciado Andrés Manuel López Obrador.

Señor presidente:

Le expreso mi gratitud por la confianza y el honor que me otorga al nombrarme comandante de la Guardia Nacional. Tenga presente la certeza de que pondré en tan importante tarea mi mejor esfuerzo, dedicación y compromiso.

Estamos reunidos en esta importante ceremonia para celebrar un hecho histórico: formalizar el despliegue de la que será la más grande institución de seguridad pública creada en la historia de México.

De acuerdo con lo señalado por la ley, la Guardia Nacional es una institución de seguridad pública de carácter civil, disciplinada y profesional. Su objetivo es realizar la función de seguridad pública con el fin de salvaguardar la vida, integridad, seguridad, bienes y derechos de las personas; preservar las libertades y contribuir a la generación y preservación del orden público.

Durante la etapa inicial de la Guardia Nacional participan integrantes de la Policía Militar, la Policía Naval y la Policía Federal. De esta manera, la visión militar y la visión civil se dan la mano, aportando cada una sus valores, sus experiencias y sus conocimientos que se complementan para enriquecer a esta nueva institución.

En consecuencia, el trabajo del comandante de la Guardia Nacional se ha orientado a armonizar lo mejor de dos maneras de servir a la sociedad: profesión militar y la profesión policial. Por ello, una acción fundamental ha sido la homologación de conocimientos, así como la integración de soldados, marinos y Policía Federal, buscando generar una sólida base de identidad.

El propósito es tener una institución con un nuevo espíritu de cuerpo que distinga y proyecte a la Guardia Nacional. Para ello, hemos desarrollado un estricto proceso para seleccionar mujeres y hombres con perfiles éticos, físicos, de salud y de personalidad que sean garantía de entrega, eficiencia y compromiso en su desempeño.

Estamos trabajando para lograr que en la Guardia Nacional el sello de la casa sean los valores de legalidad, objetividad, eficiencia, profesionalismo, honradez y respeto a los derechos humanos. Además, también nos impulsan la disciplina, el amor a la patria, el cumplimiento del deber y el combate a la corrupción.

A lo anterior sumaremos los principios del uso de la fuerza, el conocimiento del Sistema de Justicia Penal y la actualización en técnicas policiales.

La clave de nuestro éxito estará en la capacitación constante y permanente de todos los integrantes de la Guardia Nacional. Permítanme enfatizarlo, la capacitación constante y permanente será la clave de nuestro éxito.

Solo así lograremos alcanzar los estándares de preparación de los nuevos integrantes de la Guardia Nacional al nivel que demanda la sociedad mexicana.

Tendremos que asegurarnos de que cuenten con los conocimientos y destrezas que les permitan enfrentar con efectividad cualquier situación que se les presente.

Por otra parte, la proximidad social será la premisa y principal característica en el diario actuar de la Guardia Nacional. Nos mantendremos cerca y en permanente comunicación con los segmentos de la sociedad que por distintas circunstancias sienten preocupación por su integridad personal y patrimonial.

El despliegue que hoy inicia formalmente es un paso esencial para recuperar la tranquilidad y el ambiente productivo que, sin lugar a dudas, se han visto afectados en los últimos años.

El compromiso es mayúsculo, pero habremos de cumplirlo gracias a las expresiones cívicas y jurídicas con la que acertadamente los poderes de Legislativo y Judicial han dotado al Estado mexicano.

Señor presidente de la República.

Señoras y señores:

Como un ciudadano agradecido, reconozco a todos quienes han participado en la creación, equipamiento y adiestramiento de la Guardia Nacional. En particular, el esfuerzo institucional encabezado por los secretarios de la Defensa Nacional, de Marina y de Seguridad y Protección Ciudadana.

Con decisión se cumplirá el compromiso de desarrollar acciones de relevancia histórica.

Se decidió por el camino de crear una corporación que cumpla con las exigencias de la sociedad.

Además, un referente fundamental de la Guardia Nacional será el número de efectivos, pues su dimensión permitirá la presencia permanente, en una primera etapa, en 150 coordinaciones regionales para, en etapas subsecuentes, alcanzar las 266 coordinaciones consideradas en el Plan Nacional de Paz y Seguridad 2018-2024.

El consenso que da origen a la Guardia Nacional nos brinda legitimidad, pero también nos compromete a cumplir con nuestro deber en todo momento al máximo de nuestras capacidades.

Por ello, convoco a las y los integrantes de la Guardia Nacional, a que logremos el reconocimiento de la sociedad mexicana con base en el sacrificio, la disciplina y el amor por México. Brindar seguridad a las familias mexicanas es el mayor honor que tenemos como Guardia Nacional.

En el curso de su historia, México ha enfrentado serios desafíos para seguir con la ruta de la justicia social, de los cuales invariablemente ha salido adelante; ejemplo de ello es el presidente Benito Juárez, quien tomó una serie de decisiones luego de largos y cruentos años de luchas internas para que el país recuperara la paz y la concordia.

Al triunfo liberal le siguieron medidas para organizar los pocos recursos con que se contaba en aquel momento. Una de las prioridades fue por supuesto generar las condiciones que permitieran el desarrollo de México.

Estamos conscientes de que alcanzar la paz que anhela la sociedad mexicana no sólo depende de acciones para la seguridad pública, sino también de acciones para mejorar el bienestar social y la recuperación del tejido comunitario.

En ese contexto, nos reconocemos como parte de un esfuerzo colectivo de gran trascendencia que involucra a todos los órdenes de gobierno.

Hoy, de cara a la nación, los integrantes de la Guardia Nacional hacemos el firme compromiso de trabajar al máximo de nuestras capacidades físicas e intelectuales, con la mayor entrega y el más profundo amor a la patria, teniendo como norma fundamental de nuestra actuación cotidiana el puntual respeto a los derechos humanos.

No habrá descanso, no habrá tregua y en concordancia con esto trabajaremos hasta cumplir con los mandatos de la ley y satisfacer las más sentidas demandas de la sociedad.

De acuerdo con la magnitud de la tarea es conveniente que haya una prudente administración de las expectativas a corto plazo; sin embargo, en el mediano y largo plazos las expectativas respecto a la Guardia Nacional son del más alto nivel.

Tenemos la misión que esta institución sea histórica, no sólo por ser la más grande jamás creada en territorio nacional, sino por contribuir de manera decisiva a que la sociedad mexicana vea cumplido su más grande anhelo: vivir en un país con paz y seguridad.

Muchas gracias.

MODERADOR: Hace uso de la palabra el ciudadano Alfonso Durazo Montaño, secretario de Seguridad y Protección Ciudadana.

ALFONSO DURAZO MONTAÑO, SECRETARIO DE SEGURIDAD Y PROTECCIÓN CIUDADANA: Señor presidente Andrés Manuel López Obrador; señora Gutiérrez Müller, señor presidente de la Cámara de Diputados, señor presidente de la Cámara de Senadores, señor presidente de la Suprema Corte de Justicia, señor fiscal general de la República.

Señor secretario de Sedena y de Marina, señores gobernadores, comandante de la Guardia Nacional, señores funcionarios integrantes de la Guardia Nacional:

A siete meses de la actual administración, con este abanderamiento, el gobierno del presidente López Obrador da hoy un paso histórico en el cumplimiento de la Estrategia Nacional de Paz y Seguridad.

La crisis de seguridad es sin duda alguna el reto más importante que enfrenta hoy el gobierno de la República. La herencia recibida de gobiernos anteriores es desastrosa en muchos campos, lo es particularmente en el ámbito de la inseguridad. Nos dejaron el país en medio de un ‘sálvese quien pueda’. Basta decir que las nuevas generaciones no saben lo que es la paz.

La inseguridad se dejó avanzar a niveles de emergencia nacional, heredamos instituciones de seguridad insuficientes corrompidas e impregnadas de vicios. La corrupción, esa gran plaga, particularmente se volvió un rival terrible de la seguridad.

En materia de justicia, la inocencia se volvió un lujo exclusivo para quien pudo comprarla. Esos intensos y perniciosos procesos de corrupción e impunidad ampliaron e intensificaron los efectos de la ortodoxia neoliberal, fórmula fallida que dejó profundas heridas económicas y éticas en nuestra patria. El discurso de guerra hizo la parte restante hasta desembocar en cientos de miles de vidas pérdidas y desaparecidos a causa de la violencia.

Frente a ese desastre, ni la continuidad ni los parches de coyuntura eran opción.

Estábamos obligados a buscar soluciones de fondo, era imprescindible dotar al Estado mexicano de políticas adecuadas e instrumentos suficientes para cumplir con la responsabilidad más elemental de todo estado, que es garantizar la seguridad de sus ciudadanos.

Cuando ya casi desvanecía nuestro sueño de vivir en paz nace la Guardia Nacional con un consenso histórico. Su proceso legislativo garantizó principios sustantivos en su concepción y operación.

Se trata de un cuerpo bajo adscripción y mando civil, tiene al centro de sus obligaciones el pleno respeto a los derechos humanos y un uso regulado y cuidadoso de la fuerza. La Guardia Nacional marcará el inicio del fin de la violencia en nuestro país.

Con toda responsabilidad podemos decir que con la Guardia Nacional los días más oscuros de la inseguridad quedarán en el pasado.

Nuestro gran reto sigue siendo el corto plazo, porque no obstante el amplio despliegue que ahora se anuncia, necesitamos muchos elementos más en la Guardia Nacional y eso no se logra de un día para otro. Los nuevos reclutas tienen que pasar por un amplio programa de capacitación.

Amigas y amigos integrantes de la Guardia Nacional:

Su abnegación y determinación, su dedicación y coraje, su compromiso y esfuerzo, sus valores y disciplina forman el código moral de la Guardia Nacional. Si no los hubiesen observado en sus cuerpos de origen no estarían aquí, pero su verdadera grandeza está en el sentido del deber, en su disposición a dar hasta su propia vida para salvaguardar la nuestra.

Por esas razones, entre otras, millones de mexicanos tenemos puestas en ustedes las esperanzas de vivir en paz. Están llamados a hacer época, a despertar admiración y reconocimiento social; a partir de hoy serán motivo de paz y tranquilidad para todo un país.

Esta responsabilidad histórica, reservada para ustedes, irá siempre acompañada de todos los recursos del Estado mexicanos. Seguiremos a su lado hasta coronar con éxito la misión de garantizar la paz y la tranquilidad que hoy ponemos en sus manos.

Amigas y amigos, autoridades:

La seguridad es un tema vital para la ciudadanía que está al margen de la política y de la ideología; al ciudadano no le importa incluso el carácter federal o local que nuestro orden jurídico otorga a los delitos, al ciudadano le importa la respuesta de la autoridad en su conjunto para prevenirlos y combatirlos.

El mandato de todos los mexicanos para todas las autoridades aquí reunidas es sumar, sin pequeñeces, las capacidades y esfuerzos del Estado mexicano, los tres poderes y los tres niveles de gobierno para regresar la paz y la tranquilidad a la sociedad.

La inseguridad en nuestro país tiene remedio. Está cercano el día en que nos veremos caminando libres de temores por las calles, cuando esperemos a nuestros seres queridos confiados en que llegaran sanos y salvos a nuestros hogares.

No lo lograremos de la noche a la mañana porque este problema tampoco se generó de la noche a la mañana, pero cantaremos victoria. Las y los mexicanos han confiado esa responsabilidad a los integrantes de la Guardia Nacional.

No pueden fallar. Cuando lo hayan logrado estaremos en una deuda histórica con su generosidad, su compromiso y su entrega a la patria.

Muchas gracias por su atención.

MODERADORA: El general secretario de la Defensa Nacional y el almirante secretario de Marina harán uso de la palabra.

JOSÉ RAFAEL OJEDA DURÁN, SECRETARIO DE MARINA: Licenciado Andrés Manuel López Obrador, presidente de la República y comandante supremo de las Fuerzas Armadas; doctora Beatriz Gutiérrez Müller, esposa del señor presidente; diputado Porfirio Muñoz Ledo, presidente de la Mesa Directiva de la Cámara de Diputados; senador Martí Batres Guadarrama, presidente de la Mesa Directiva de la Cámara de Senadores; ministro Arturo Zaldívar Lelo de Larrea, presidente de la Suprema Corte de Justicia de la Nación.

General Luis Cresencio Sandoval González, secretario de la Defensa Nacional; doctor Alfonso Durazo Montaño, secretario de Seguridad y Protección Ciudadana; doctor Alejandro Gertz Manero, fiscal General de la República.

Distinguidos integrantes del Gabinete Legal y Ampliad0; señor general comandante de la Guardia Nacional, respetables funcionarios del Gobierno de México, de la Secretaría de Marina y de la Defensa Nacional.

Apreciables invitados especiales, integrantes de la Guardia Nacional, compañeros de armas de mar, tierra y aire en activo y en retiro, representantes de los medios de comunicación.

Damas y caballeros:

Muy buenos días.

Antes de iniciar debo señalar que el secretario de la Defensa Nacional y su servidor realizaremos una lectura compartida de este mensaje. Y esto es así porque conjunta ha sido su concepción, construcción y contenidos de la Guardia Nacional, y porque conjunta es la visión sobre los avances que existen en el país y los retos que están por venir.

Siempre Defensa y Marina actuaremos juntos.

Todas las naciones del mundo buscan la seguridad y el desarrollo y, al mismo tiempo, enfrentan diversos desafíos para lograr estos objetivos.

En el caso mexicano un tema que reviste especial importancia es la problemática en materia de seguridad pública, que afecta a las personas, sus familias y comunidades.

Por ello se planteó generar las reformas jurídicas necesarias que permitiesen fortalecer la seguridad pública en nuestro país.

La respuesta del Legislativo, del Poder Judicial y de los gobiernos estatales ha sido emblemática para atender la demanda de seguridad y justicia de la ciudadanía, y hoy se expresa de forma concreta con la presencia de la Guardia Nacional.

La aprobación de la reforma constitucional y de diversas leyes para crear esta nueva institución fue posible gracias a la unidad de los partidos políticos representados en las cámaras de Diputados y Senadores, así como en los congresos de las entidades del país.

La iniciativa presidencial y la responsabilidad republicana del Legislativo deja en claro que la seguridad pública en México la debemos reconstruir a través de una suma de esfuerzos donde participen de forma sincronizada y bajo una estrategia eficaz las instituciones, los tres órdenes de gobierno y la sociedad en su conjunto.

El presidente de México y comandante supremo de las Fuerzas Armadas estableció una estrategia enfocada a que las personas puedan vivir en un país seguro y justo; se trata de una estrategia integral que parte del diagnóstico de las causas que originaron el incremento de las conductas delictivas y que señala objetivos específicos de trabajo para fortalecer el Estado social de derecho, la tranquilidad y la seguridad.

Al seno de esta visión de seguridad, que va desde crear oportunidades para los jóvenes hasta combatir la corrupción y la impunidad, es que hoy asistimos a la revista de entrada de la Guardia Nacional, institución civil de seguridad pública del Estado mexicano.

La Guardia Nacional inicia formalmente sus funciones y se enfocará a la salvaguarda de la vida, las libertades, la integridad y el patrimonio de las personas y sus familias, y también contribuirá a generar y preservar el orden público y la paz social.

La Guardia Nacional seguirá construyéndose y las Fuerzas Armadas aportarán recursos humanos y materiales hasta consolidar su funcionamiento y operatividad al servicio de México.

Este gran esfuerzo de seguridad pública, a partir de hoy se suma al Sistema Nacional de Seguridad y Justicia, y habrá de trabajar con las 32 secretarías de Seguridad Pública, las 32 fiscalías y las policías estatales y municipales de México, y desde luego estará atenta a la colaboración que deberá brindar los poderes judiciales, federales y estatales.

Personal integrante de la Guardia Nacional:

Todo lo anterior no lo tomen como una tarea más, tómenlo como una consigna a seguir, convencidos de que están para servir a la sociedad y a México, siempre con compromiso y voluntad y con respeto a los derechos humanos.

Como ustedes saben muy bien, la Secretaría de la Defensa Nacional, la Secretaría de Marina Armada de México y la Policía Federal son las instituciones de mayor aceptación dentro de nuestra sociedad, y para ustedes esto representará un reto a seguir, ya que con su actuar deberán llegar a ser la institución que la sociedad mexicana admire y respete más. Esa es y será siempre su gran labor.

Que nunca se les olvide que siempre tendrán el respeto, el respaldo incondicional de las Fuerzas Armadas.

Cedo con gusto la palabra al mi general secretario de la Defensa Nacional.

Muchas gracias.

LUIS CRESENCIO SANDOVAL GONZÁLEZ, SECRETARIO DE LA DEFENSA NACIONAL: Señor presidente.

Los soldados de mar, tierra y aire no tenemos duda de que el proyecto de la Guardia Nacional es sólido y cuenta con cimientos fuertes para sostenerlo, así como un amplio

respaldo político, legislativo y jurídico.

Hoy tenemos ante nosotros una corporación policial con identidad propia, estructura definida, disciplina, valores y principios que le permitirán actuar con legalidad, ética y pleno respeto y defensa a los derechos humanos.

Por ello, ante usted señor presidente y ante el pueblo de México, las Fuerzas Armadas refrendamos que nos sumamos de forma decisiva a este tipo de proyectos encaminados al desarrollo de nuestro pueblo.

Agradecemos la confianza que el pueblo de México nos confiere para que las policías Militar y Naval formen los cuadros de la Guardia Nacional y al mismo tiempo asumimos el compromiso de contribuir a su consolidación.

Se trata de personal profesional formado por años en los sistemas educativos naval y militar y también personal muy valioso de la Policía Federal que decidió adaptarse a las nuevas condiciones y aportar conocimientos técnicos y especializados en el ámbito policial.

Compañeros de armas, ahora integrantes de la Guardia Nacional:

Los marinos y soldados sabemos que el compromiso adquirido es grande al igual que expectativa sobre los resultados que dará esta institución nacional. Hoy les reiteramos que deben sentirse honrados y seguros, porque además de la formación y adiestramiento que recibieron en la función policial, ustedes cuentan con las virtudes que poseen quienes con patriotismo trabajan sin descanso por México, aun con riesgo de su propia vida, lo cual se interpreta como vocación de servicio e institucionalidad.

En este punto, permítanme señalar tres factores sustantivos:

Primero. La Guardia Nacional se diseñó y construyó para atender la seguridad pública, es decir, para salvaguarda la vida y los bienes de las personas.

Segundo. Cada uno de ustedes se capacitó en la función policial, sabe trabajar como primer respondiente en coordinación con el Ministerio Público y, en su caso, bajo su dirección.

Y tercero. En su formación se les inculcó que nunca, y bajo ninguna circunstancia, dejarán de observar las garantías procesales y libertades públicas que establece nuestra Constitución.

Continúen actuando con profesionalismo, sentido del deber y honestidad, apegados a la legalidad, respetando el derecho humano al debido proceso y aplicando los principios del uso estrictamente necesario, razonado y proporcional de la fuerza.

Recuerden que sigue vigente el juramento que hicieron de honrar y defender nuestra bandera nacional; porten con orgullo su uniforme y correspondan en los hechos a la confianza que les ha otorgado el pueblo de México.

Apreciable auditorio:

Nuestra nación cuenta con Fuerzas Armadas leales e institucionales, surgidas del pueblo y con arraigo a una mística de servicio a la patria; Fuerzas Armadas que son flexibles y que han sabido adaptarse a las circunstancias que en su devenir la situación les ha impuesto. Y en estos tiempos que vivimos no es diferente, nos ajustamos a la realidad y somos conscientes de la necesidad de coadyuvar en los esfuerzos que se realizan en materia de seguridad pública.

Por ello, cumplimos a cabalidad la instrucción presidencial, sumándonos a esta tarea de conformidad con lo establecido en nuestra Carta Magna.

El pueblo de México debe estar seguro de que no descuidaremos las misiones orgánicas que como Fuerzas Armadas tenemos encomendadas en su beneficio y que son en esencia: defender la integridad, independencia y soberanía de la nación, garantizar la seguridad interior, auxiliar a la población civil en caso de necesidades públicas, realizar acciones cívicas y otras sociales que tiendan al progreso del país.

En caso de desastres prestar ayuda para el mantenimiento del orden, auxilio de las personas y sus bienes, y la reconstrucción de las zonas afectadas.

Lo hacemos porque la seguridad de los mexicanos es lo más importante, aportamos personal, material y equipo para que la Guardia Nacional cuente con las capacidades necesarias que aseguren su funcionamiento.

En este contexto, y observando las medidas de austeridad, seguiremos apoyando a través de los sistemas logísticos militar y naval para darle autosuficiencia y operatividad.

México nos necesita a todos, necesita que los poderes de la Unión, los tres órdenes de gobierno, instituciones, sociedad, Guardia Nacional y Fuerzas Armadas trabajemos de manera estrecha y coordinada.

Necesita que caminemos juntos, aportando lo mejor desde nuestros hogares, desde los centros educativos, desde nuestras comunidades y desde nuestros ámbitos laborales para que salgamos adelante ante los retos que se nos presentan.

La Guardia Nacional es un elemento importante en una estrategia mayor, que consiste en transformar al país. El desafío parte desde generar bienestar social hasta desterrar la corrupción, pasando por producir empleos, mejorar la educación, la salud y los servicios, ampliar la seguridad social, restaurar el tejido colectivo, fortalecer las industrias estratégicas, colocar a la persona en el centro de la política social y proyectar la diversidad de nuestro mosaico ético nacional en la vida cotidiana.

Es momento de visualizar el país que legaremos a las nuevas generaciones, es momento de apostar al éxito en los proyectos fundados en las aspiraciones nacionales como es el caso de la Guardia Nacional. Es momento de que como mexicanos sumemos esfuerzos y voluntades para lograr los objetivos nacionales de libertad, seguridad y justicia social.

Enhorabuena por esta nueva institución al servicio de los mexicanos.

Muchas gracias.

MODERADOR: Escuchemos el mensaje que dirige el licenciado Andrés Manuel López Obrador, presidente constitucional de los Estados Unidos Mexicanos.

PRESIDENTE ANDRÉS MANUEL LÓPEZ OBRADOR: Amigas, amigos todos.

Integrantes de la Guardia Nacional.

Representantes de los poderes de la República.

Presidente de la Suprema Corte de Justicia de la Nación.

Coordinadores de los legisladores en la Cámara de Diputados, en la Cámara de Senadores.

Fiscal General de la República.

Señores gobernadores, gobernadora, jefa de gobierno de la Ciudad de México.

Soldados, marinos, policías, oficiales de las Fuerzas Armadas.

Es sin duda un hecho histórico el iniciar las labores de esta nueva institución denominada Guardia Nacional.

Se padece en nuestro país del grave problema de la inseguridad y de la violencia que se profundizó, se intensificó en los últimos tiempos, a la par que se imponía una política económica antipopular y entreguista, una política para favorecer a una pequeña minoría que dejó en el abandono a la mayoría del pueblo de México. Eso fue lo que desató la inseguridad y la violencia en nuestro país.

Y en vez de atender esas causas que originaron la violencia, se optó únicamente por el uso de la fuerza, además fingiendo, simulando, porque ni siquiera en ese sentido hubo responsabilidad y profesionalismo.

Se mantuvo en los momentos más difíciles de mayor violencia una ambigüedad doble: por un lado se impedía legalmente en la Constitución la participación de las Fuerzas Armadas en tareas de seguridad pública; y por otro lado se creó una institución, la Policía Federal, hace 20 años, que se fue degradando, que fue echándose a perder; de 40 mil elementos, se puede contar realmente con 10 mil, mientras -como aquí se ha expresado y coincido- dos instituciones del Estado mexicano, la Secretaría de la Defensa, la Secretaría de Marina, las mejores calificadas por el pueblo de México, permanecían al margen o eran usadas sólo para llevar a cabo operativos en contra del narcotráfico, porque eran otras las prioridades.

No estaba en el centro el proteger a los mexicanos, el garantizar la seguridad pública. Por eso la creación de esta Guardia Nacional es algo muy trascendente, oportuno.

Se agradece a los legisladores federales, locales, que de manera unánime reformaron la Constitución General de la República para permitir que puedan participar las Fuerzas Armadas en auxilio del pueblo de México en momentos difíciles de inseguridad y de violencia.

El diseño de esta Guardia Nacional, que parte de la reforma a la Constitución, significa lo que en los hechos hemos venido haciendo desde los primeros días de gobierno: el trabajar de manera coordinada.

Antes, cada institución hacía lo propio, lo que le correspondía, muchas veces hasta se enfrentaban las instituciones, no había la coordinación suficiente, había desconfianza entre las mismas instituciones. Ahora se trabaja de manera conjunta, en forma coordinada.

Ha quedado de manifiesto en este acto la forma en que han intervenido el secretario de la Marina y el secretario de la Defensa. Hablaron, como se dice coloquialmente en términos taurinos, ‘al alimón’. Esto demuestra que estamos unidos, que estamos juntos.

Todos los días nos reunimos desde muy temprano el Gabinete de Seguridad, los secretarios de la Defensa, de Marina, la secretaria de Gobernación, el secretario de Seguridad Pública. Y todos los días desde la 6:00 de la mañana recibimos el reporte, el parte de lo sucedido en materia de seguridad en todo el país, coordinación que es fundamental.

También con la Guardia Nacional se unen esfuerzos: la Policía Militar, la Policía Naval, la Policía Federal. Y de esta manera se fortalece este cuerpo para la seguridad pública, esta nueva institución.

Quiero dirigirme a ustedes, a los integrantes de la Guardia Nacional, para destacar la importancia que tiene el trabajo que van a realizar. Es una noble causa en beneficio del pueblo, en beneficio de la nación.

Ustedes forman parte del pueblo. Los soldados, los policías, los marinos son pueblo uniformado, ustedes saben bien lo que sucede en nuestro país, conocen la realidad desde abajo, desde las comunidades, los pueblos, las colonias, los barrios de México, saben que es necesario el que logremos la paz, la tranquilidad.

Y de ustedes va a depender mucho, porque ustedes son el alma de esta institución. Las instituciones tienen su valor por los hombres y las mujeres que las integran, y sobre todo por la conducta de las mujeres y de los hombres que integran las instituciones, por el recto proceder que tienen los integrantes de las instituciones.

Yo les pido, en nombre del pueblo de México, cuando menos tres cosas:

Primero. Que actúen con honradez, con honestidad, que piensen que es mejor, mucho mejor heredar a los hijos pobreza que deshonra. Nosotros vamos a procurar que tengan buenos ingresos, que reciban salarios justos, con todas las prestaciones sociales, porque la tarea de ustedes es fundamental.

No van a haber sueldos elevados para los altos funcionarios públicos y sueldos raquíticos para quienes llevan a cabo labores fundamentales que tienen que ver con la paz y la tranquilidad de nuestro pueblo. Ese es un compromiso: buenos sueldos y buenas prestaciones.

Otra cosa que les pido es que actúen con dedicación, con trabajo, que se comprometan a no permitir que haya inseguridad y que haya violencia, que se apliquen a fondo, de manera profesional. Nada de sólo cumplir con las formas, de simular, sino que trabajen de manera consciente en favor de nuestro pueblo.

Y lo tercero es que no olviden que del trabajo de ustedes va a depender mucho el que llevemos a cabo entre todos los mexicanos la Cuarta Transformación de la vida pública de México.

Que formen parte, que sean actores principales de esta transformación, ustedes, los integrantes de la Guardia Nacional. La vanguardia para lograr la transformación de México, en beneficio de nuestro querido pueblo y de nuestra nación. Vamos a adelante.

Celebro que se tenga esta institución, porque estamos avanzando, resolviendo problemas en otros campos, en otros terrenos.

Está bien la economía, vamos bien en política, se está llevando a cabo la Cuarta Transformación. No se tolera la corrupción, no se tolera la impunidad.

Se está aplicando el programa de bienestar más importante que se haya realizado en la historia de México en beneficio de nuestro pueblo. Están llegando las ayudas a los mexicanos y sobre todo a la gente más humilde, a la gente más pobre.

Pero tenemos como pendiente resolver el grave problema de la inseguridad y de la violencia. Ahí no podemos decir que se ha avanzado, ahí desgraciadamente prevalecen las mismas condiciones que heredamos de los gobiernos anteriores en cuanto a inseguridad y violencia.

Pero fue importante tomar la decisión de crear esta Guardia Nacional y lo hemos hecho en poco tiempo, siete meses; se reforma la Constitución, se aprueba en los congresos locales, se elaboran reglamentos, leyes secundarias, se empieza a reunir a todos los elementos de la guardia.

Y el día de hoy se inicia formalmente el despliegue, la operación de la Guardia Nacional que va a estar en 150 regiones del país, que va a cubrir una primera etapa todo el territorio nacional con 70 mil elementos; y poco a poco va a ir creciendo, porque vamos a tener, a cubrir 266 regiones con 150 mil elementos de la Guardia Nacional. Ya empezamos y se va a consolidar pronto también esta institución.

Hemos avanzado rápido, no hemos tenido obstáculos porque contamos con el apoyo sincero de las Fuerzas Armadas.

Quiero reconocer la lealtad de marinos, de soldados y de los oficiales de estas dos instituciones que, repito, son dos pilares para el buen funcionamiento del Estado mexicano. Y me ayuda mucho el que no sólo actúen con lealtad, sino que internalicen mi manera de pensar y coincidan conscientemente los dos secretarios, el almirante Ojeda y el general Sandoval.

Ustedes los han escuchado, hablan de que el problema de inseguridad y de violencia se origina por causas sociales, económicas. Los dos hablan de que tenemos que actuar, pero respetando los derechos humanos con el uso moderado de la fuerza, que no se trata de avasallar, de masacrar, de reprimir a nuestro pueblo.

Esto es muy importante porque las dos instituciones, la Marina y el Ejército, tienen elementos suficientes, tienen instalaciones, sobre todo disciplina, profesionalismo y con una concepción nueva como la que se está asimilando y llevando a la práctica por los dos secretarios. Podemos darle un giro a esas instituciones para que se puedan orientar, dedicar a lo que más preocupa actualmente al pueblo: a garantizar la seguridad pública sin violar los derechos humanos y utilizando de manera pertinente, moderada la fuerza.

Si logramos esto, estoy seguro, se va a alcanzar, vamos a entregar pronto buenas cuentas al pueblo de México. Por eso celebro participar en esta ceremonia.

Quiero también expresar que le tengo toda la confianza al general Bucio, comandante de la Guardia Nacional.

Cada vez que vaya a una región donde estén ustedes cumpliendo con su deber, voy a procurar verles, que podamos comunicarnos para que juntos garanticemos la paz y la tranquilidad en nuestro país.

Yo creo en ustedes, tengo confianza en ustedes y sé que ustedes no van a defraudar al pueblo de México, porque vienen del pueblo, pertenecen a nuestro querido pueblo de México y somos parte todos de esta gran nación.

¡Que viva México!

¡Viva México!

¡Viva México!

¡Viva México!

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