Por segunda vez en el año, Nacional Financiera (Nafin) realizó una colocación en los mercados internacionales, a través de una nueva emisión en el mercado japonés por 15 mil millones de yenes a un plazo de 5 años 3 meses.

Esta colocación se realizó mediante una emisión privada a diversos inversionistas japoneses por un monto de 15 mil millones de yenes (aproximadamente 132 millones de dólares) a un plazo de cinco años y 3 meses.

El libro abrió el pasado viernes 20 de octubre considerando una tasa mid swap interpolada a un plazo de 5.25 años + 55 a 57 puntos base. Para el segundo día del anuncio, el libro alcanzó los 30,000 millones de yenes, lo que permitió aterrizar el diferencial sobre la tasa mid swap a solo 54 puntos base.

El rendimiento final al inversionista fue 0.66%, lo que representa 12 puntos base por debajo del nivel de la pasada emisión realizada en el mes de marzo y a un plazo mayor por 3 meses.

Adicionalmente destaca que esta emisión estuvo dos puntos base por debajo del nivel interpolado de los bonos UMS en yenes.

Dicho instrumento obtuvo la calificación de BBB+ por parte de la agencia calificadora Fitch, reflejando la alta calidad crediticia de Nacional Financiera. Además, contó con la participación de 10 inversionistas japoneses, entre los que destacan aseguradoras, bancos comerciales y uniones de crédito. El banco colocador que participó en la transacción fue DAIWA.

Cabe destacar que este es el tercer instrumento financiero colocado por Nafin que cuenta con participación de inversionistas japoneses (los dos primeros son el programa de Certificados de Depósito y el Bono Verde emitido en 2015).

Con esta transacción, y de acuerdo con su estrategia de fondeo, Nacional Financiera logra un mejor posicionamiento en los mercados internacionales, logrando ampliar y diversificar su base de inversionistas.

Dicha emisión está en línea con el plan anual de financiamiento 2017, el cual establece la posibilidad de realizar emisiones privadas en diferentes divisas, siempre y cuando se logren alcanzar costos competitivos.

Esta transacción es un reflejo de la confianza por parte de inversionistas japoneses hacia México y en particular hacia Nacional Financiera, después de convertirse, en marzo pasado, en el primer banco de desarrollo mexicano en colocar yenes en los últimos catorce años, situación que se ve reflejada en los costos alcanzados y en la constante disminución en los spreads respecto de los bonos del Gobierno Federal.

Con esta colocación, finaliza la actividad de fondeo de la institución durante 2017, misma que concluye con éxito, logrando ampliar la presencia de Nafin en los mercados internacionales.