Para que los niños tengan un sano desarrollo físico y mental es indispensable una dieta saludable, pues esto ayudará a prevenir anemia, diabetes o alguna otra enfermedad grave.

Es importante añadir frutas y verduras en la alimentación diaria de los pequeños, carnes reducidas en grasas, huevo y frutos secos como almendras, nueces, piñones y amaranto, entre otros, así como cereales integrales, sin olvidar suficiente agua.

Reducir la ingesta de azúcar y sal añadida también permitirá que los niños tengan una mejor nutrición.