El pueblo lacandón es una parte importante de la selva, son sus protectores, la naturaleza es muy valiosa para ellos, por lo que le brindan el cuidado y su agradecimiento. No toman de la tierra más de lo que necesitan, pues sólo aprovechan la fruta o hierba que les sirve para su sustento, es decir, ellos cultivan y cosechan sus propios alimentos como el maíz, la calabaza, el jitomate, frijol, tubérculos, condimentos, entre otros, sin depredar la tierra que les da de comer. De igual manera, la caza es una actividad que realizan únicamente cuando lo consideran necesario.
Tanto su ropa como su calzado buscan la armonía y el acercamiento con el entorno que los rodea; los hombres usan túnicas de manta blanca, mientras que las mujeres portan vestidos floreados como símbolo de devoción a la Madre Tierra.
Felipe es un niño que vive en la Selva Lacandona junto a su familia. Esta historia nos cuenta la vida de este pequeño, sus costumbres, y describe el lugar donde vive. Podremos conocer su admiración por animales considerados sagrados, como el jaguar y el lagarto. Pero lo que él no sabe, es que el día menos pensado, a su corta edad, tendrá un encuentro sopresivo.
Adéntrate a este relato y conoce la aventura de Felipe Q’uin en la Selva Lacandona de Chiapas, en la frontera de México con Guatemala. Un libro escrito por Jashui Jatsiri Pizarro Márquez e ilustrado por Diana Rubí Guzmán Juárez.
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