La gran victoria del pueblo mexica sobre los conquistadores dio comienzo en 1520, en una época en dónde, sobre el gran territorio del Valle de México, que era habitado por grandes poblaciones construidas bajo una jerarquía rigurosa, las tensiones eran visibles, sin embargo, eso no hizo desistir a los grandes guerreros mexicas.
Se decía mucho del gran lago de Texcoco, de sus habitantes, de las riquezas que dichas tierras acumulaban, los españoles, atraídos por una curiosidad, ambición y avaricia abundantes, partieron rumbo a la gran tierra de los mexicas. A su paso, admiraban las grandes construcciones que conformaban las ciudades, edificaciones grandes e imponentes, que no hacían más que reforzar la idea que se tenía de la gran Tenochtitlan.
Las contradicciones que se desarrollaron en el encuentro de Cortés con el gran señor tlatoani Moctezuma, donde sus ideologías eran contrapuestas, hizo que las relaciones entre españoles y mexicas se tensara, comenzando con la aprehensión de Moctezuma, que fue tomado como rehén, aunado a esto, los enemigos del imperio de la gran Tenochtitlan, los tlaxcaltecas y otros asentamientos del Valle que eran tributarios de la que fue la última gran Triple Alianza.
Hubo un momento en el cuál había una gran ventaja de los españoles sobre los mexicas, pues Cortés se ausentaría al partir a la Villa Rica de Vera Cruz a enfrentar a Pánfilo de Narváez, que había sido mandando por Diego de Velázquez, dados los rumores de que Cortés hacía mal uso de su poder sobre las “nuevas tierras descubiertas”.
Dado el momento, bajo el acompañamiento de cientos de españoles encabezados por Pedro de Alvarado, se cometió lo que es hoy día conocido como un genocidio indígena, o bien “La matanza del Templo Mayor”, con varios argumentos que justificaron dicha acción, uno de ellos fue la víspera de los rituales ofrecidos a los dioses Tezcatlipoca y Huitzilopochtli, la fiesta del Tóxcatl, que para los españoles simulaba una burla y un engaño a deidades no reconocidas. Se trató de impedir dicho ritual, aconteciendo a consecuencia una lucha a muerte, donde si bien muchos mexicas fallecieron, muchos otros permanecieron en pie de lucha, dando así origen a la Gran Victoria Mexica.
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