Una de las funciones asignadas a la Comisión Nacional para el Desarrollo de los Pueblos Indígenas es operar un sistema de información e indicadores por medio del cual identifica, cuantifica y caracteriza a la población indígena de México, con la finalidad de brindar información que permita orientar la acción pública.

La cuantificación y ubicación de la población indígena en el territorio nacional, así como la generación de estadísticas e indicadores se realiza partir del tratamiento de los datos e información proveniente de los levantamientos censales y conteos de población que periódicamente lleva a cabo el Instituto Nacional de Geografía y Estadística, INEGI.

Con base en esa fuente de información, la CDI aplica una propia metodología para cuantificar estadísticamente a la población indígena por medio de la identificación de hogares indígenas. Se parte de considerar que el hogar es un espacio de identificación y transmisión de la cultura, dentro de él existen lazos de parentesco y afectividad fuertes que inciden en el desarrollo de las identidades. Además, en el hogar se comparten decisiones, recursos y se construyen redes comunitarias, de la vida y de las relaciones territoriales, mediadas por una visión colectiva. El papel del hogar en la socialización de los individuos y en la transmisión cultural permite suponer que en aquellos hogares en los que las generaciones encargadas de establecer y transmitir los valores, normas y costumbres son personas indígenas, las generaciones más jóvenes compartirán y asumirán como propias ciertas características de cultura e identidad indígena[1].

Por tanto, la estimación del volumen de la población indígena parte de la identificación de los hogares indígenas, es decir, aquellos en donde el jefe (a) o alguno de los ascendientes (el cónyuge y/o padre o madre del jefe y/o suegro o suegra del jefe) hablan lenguas indígenas, posteriormente todos los integrantes de los hogares indígenas identificados se consideran población indígena y para complementar la cuantificación de esta población se considera a los hablantes de lenguas indígenas que no forman parte de estos hogares.

Esta metodología ha permitido a la CDI generar una estadística nacional, que se concentra en el Sistema de Indicadores sobre la Población Indígena de México, con información a nivel estatal, municipal y por localidad, cuando la información está disponible y, de esta forma, dar cuenta de las condiciones de vida y la distribución de la población indígena en el territorio nacional.

En este contexto, con motivo de la conmemoración del Día Internacional de la Mujer el 8 de marzo, la Comisión Nacional para el Desarrollo de los Pueblos Indígenas presenta un conjunto de indicadores que muestran aspectos relevantes sobre la situación sociodemográfica de las mujeres indígenas de México, con base en el tratamiento estadístico realizado a los datos de la Encuesta Intercensal 2015.

Población indígena

A partir de la Encuesta Intercensal 2015 y el criterio de hogar indígena se cuantifica un total de población indígena de 12 millones 25 mil 947 personas, que constituye el 10.1% de la población nacional.

Del total de población indígena estimada 6 millones 146 mil 479 son mujeres (51.1%) y 5 millones 879 mil 468 son hombres (48.9%). En la distribución de la población indígena a nivel geográfico en números absolutos de cada 100 personas indígenas, 75 se concentran en ocho entidades federativas de la siguiente forma: Oaxaca y Chiapas con 1.7 millones cada una, que son las que cuentan con la mayor cantidad de población indígena, equivalente al 14.4% y 14.2%, respectivamente; le siguen Veracruz, con 1.1 millones de población indígena (9.2%); México, 1.097 millones (9.1%); Puebla, 1.094 millones (9.1%); Yucatán 1.052 millones (8.8%); Guerrero 681 mil 615 (5.7%) e Hidalgo 606 mil 045 (5.0%). En el extremo opuesto en seis entidades la población indígena suma menos de 30 mil personas: Guanajuato, Baja California Sur, Coahuila, Colima, Aguascalientes y Zacatecas con 29 mil 863, 23 mil 456, 13 mil 349, 10 mil 122, 9 mil 306 y 7 mil 852, respectivamente, mismos que significan menos del .01% del total de la población indígena.

Población indígena por sexo y entidad federativa 2015. 

Para identificar la distribución de la población indígena en el territorio nacional la CDI ha desarrollado una tipología de municipios con base en la representatividad de la población indígena con respecto al total de la población municipal. De esta forma se identifican las siguientes cuatro categorías de municipios: 1) indígenas; 2) con presencia de población indígena; 3) con población indígena dispersa, y, 4) municipios sin población indígena. Con base en esta tipología se identifica que en los municipios con mayor concentración de población indígena existe un mayor porcentaje de mujeres que hombres y viceversa en los municipios con presencia de población indígena o población indígena dispersa.

Los municipios indígenas son aquéllos en donde el 40% o más de su población total es indígena, suman 623 y en ellos se concentra el 56.4% de la población indígena (6 millones 784 mil 510 de personas). En estos municipios viven 3 millones 488 mil 713 mujeres indígenas, que representa 56.8% y 3 millones 295 mil 79 hombres, 56.1%.

Los municipios con presencia de población indígena se distinguen por dos características: 1) son aquéllos en donde la población indígena es igual o mayor a 5000 personas (los cuales se consideran de interés porque cuentan con un volumen importante de la población en términos absolutos), y 2) aquéllos en donde reside población que habla alguna lengua con menos de 5,000 hablantes.

Los municipios con presencia de población indígena son 251, ellos concentran 4.2 millones de población indígena (35%), de los cuales 2 millones 147 mil 843 son mujeres (34.9%) y 2 millones 085 mil 216, hombres (35.5%).

En los municipios con población indígena dispersa viven 1 millón 8 mil indígenas, que representan el 8.3% de la población indígena total, de los cuales 509 mil 923 son mujeres (8.2% del total de mujeres) y 498 mil 455, hombres (8.5% de total de hombres).

Municipios indígenas.

Porcentaje de población indígena por sexo y tipo de municipio de residencia.

En cuanto a la distribución por tamaño de localidad de residencia, el 51.2% de la población indígena radica en localidades con menos de 2 500 habitantes, otro 28% reside en poblaciones con más de 2 500 pero menos de 15 000 habitantes y como resultado de los acelerados procesos migratorios, el 18.1% de la población indígena reside en ciudades con más de 100 mil habitantes.

En las localidades menores de 2 500 habitantes la proporción de mujeres y hombres es similar al de la población indígena total, es decir de los 6 millones 151 mil 541 personas indígenas, 51.1% son mujeres y 48.9%, hombres. En las localidades con más de 2 500 pero menos de 15 000 habitantes, el porcentaje es ligeramente mayor para las mujeres (51.5%) y menor para los hombres (48.5%). Sin embargo, en las localidades con más de 100 mil habitantes ocurre la situación inversa, el porcentaje de hombres aumenta a 49.3% y el de mujeres disminuye a 50.7%, lo cual habla de que en los flujos migratorios tienden a participar más los hombres con relación a las mujeres.

Población indígena según sexo y tamaño de localidad.

La mayor presencia de los hombres en los flujos migratorios se confirma al distinguir  las diferencias entre mujeres y hombres en la población que en 2015 residía en otra entidad o país con relación al levantamiento censal de 2010, es decir la población que cambió el lugar de residencia en los últimos cinco años. En cuatro entidades el porcentaje de hombres en esta condición es entre cuatro y cinco por ciento mayor al de las mujeres. La gráfica da cuenta que esta relación acontece en las siguientes entidades Aguascalientes, Coahuila, Guanajuato y Sinaloa.

Porcentaje de población indígena por sexo que residía en otra entidad o país en marzo de 2010.

Relación de mujeres y hombres por tamaño de localidad

Si bien en las localidades rurales, el 51.1% de los habitantes son mujeres y 48.9%, hombres, en siete entidades el porcentaje de mujeres en la población indígena rural es mayor: Michoacán (52.6%), México (52.1%), Guerrero (52.1%), Puebla (52.1%), Oaxaca (52%), Hidalgo (51.7%), y Querétaro (51.3%). Por otro lado, en catorce entidades federativas la población indígena que reside en localidades con menos de 2500 habitantes presenta un porcentaje mayor de hombres con respecto al de las mujeres: Colima, Baja California Sur, Coahuila, Aguascalientes, Tamaulipas, Sinaloa, Nuevo León, Baja California, Zacatecas, Sonora, Tabasco, Quintana Roo, Distrito Federal y Campeche.

Porcentaje de mujeres y hombres en la población indígena rural.

En las zonas urbanas se observa que hay un mayor número de hombres que mujeres en la población indígena que habita ciudades de más de 100 mil habitantes, de los siguientes estados Baja California Sur (56.8%), Colima (55.2%), Coahuila (53.1%), Sinaloa (52.6%), Zacatecas (52.6%), Quintana Roo (51.6%), Nuevo León (51%), Jalisco (50.9%), Tamaulipas (50.7%), Guanajuato (50.7%), Nayarit (50.5%), Sonora (50.4%), Durango (50.4%), San Luis Potosí (50.2%) y Baja California (50.2%).

Porcentaje de mujeres y hombres en la población indígena urbana (ciudades de más de 100 mil habitantes)

Relación mujeres-hombres e índice de dependencia

El índice de femineidad expresa la relación entre el número de mujeres y el de varones, en una población determinada. En 2015, a nivel nacional, había en el país casi 106 mujeres por cada 100 hombres, entre la población indígena esta relación es de 104.5. En 17 entidades federativas dicha relación se presenta en el mismo sentido (mayor número de mujeres que de hombres), acentuándose en los estados de Michoacán, Oaxaca, Puebla, Guerrero, Hidalgo y México.

Indice de femineidad según entidad federativa 2015.

Por otra parte, el índice de dependencia general constituye un indicador útil para identificar la relación entre la población económicamente activa y la que de ella depende. La relación de dependencia se define como la razón entre el conjunto de personas en edades “dependientes” (menores de 15 años y mayores de 64) respecto al grupo de población en edades económicamente productivas (15 a 64 años). Este concepto está asociado con la población en edades dependientes representadas por niños y ancianos respecto a aquellos que están en edad de trabajar. Su comportamiento se describe de la siguiente forma: ante valores mayores del índice el número de dependientes por cada persona en edad laboral es mayor e inversamente, con valores menores, es menor el número de personas que dependen de cada individuo potencialmente activo en la economía.

A nivel nacional la relación de dependencia es de 53 en 2015, constituida en 42 por la dependencia infantil y 11 por la de la vejez. Entre la población indígena el índice de dependencia alcanza 64.5, formada en 52.3 por la dependencia infantil y 12.2 por la de la vejez.

En los municipios indígenas se aprecia la mayor dependencia entre niños (0 a 14 años) y ancianos (65 años y más) respecto a cada persona entre 15 y 64 años, tomando un valor de 72; mientras que, en los municipios con presencia de población indígena el índice disminuye a 54 dependientes por cada persona en edad productiva.

A nivel nacional la relación de dependencia es de 54.2 para los hombres y 50.3 para las mujeres. En la población indígena la diferencia entre los sexos se incrementa debido a que es de 67 en los hombres y 62 en las mujeres y en los municipios indígenas se presenta la mayor diferencia en el número de dependientes entre la población masculina de 75, y el de las mujeres, 68.

Relación de dependencia, infantil y de la vejez de mujeres y hombres en la población indígena por tipo de municipio de residencia

Fecundidad

La fecundidad de la población indígena muestra un descenso significativo en relación al promedio de hijos nacidos vivos de las mujeres entre 15 y 49 años de edad. En 2015, el promedio de hijos en las mujeres indígenas de ese grupo de edad es de 2.0, mientras que el promedio a nivel nacional es de 1.7.

Las indígenas que residen en los municipios indígenas son las que mantienen una fecundidad relativamente más elevada, 2.2 hijos por mujer, mientras que las indígenas en municipios con presencia indígena, que corresponden a ámbitos más urbanos, tienen 1.8 hijos por mujer indígena; es decir, 0.4 hijos menos.

En Nayarit, Durango, Chiapas, Guerrero y Chihuahua los promedios son entre 2.31 y 2.61. En Nuevo León y la Ciudad de México se presentan los promedios indígenas más bajos, 1.5 y 1.39, respectivamente.

Promedio de hijos nacidos vivos.

Promedio de hijos nacidos vivos mujeres de 15 a 49 años

Situación conyugal

La situación conyugal predominante de la población indígena de 12 y más años es la de casada o en unión libre, ya que 55.6% de las mujeres y 57.8% de los hombres se encuentran en ese estado, seguida por la soltería, con proporciones de 31.4% y 37.4%, para cada sexo, respectivamente.

Distribución porcentual de la población indígena por hogar de 12 años y más por sexo según situación conyugal, 2015.

En la población indígena las uniones suelen llevarse a cabo en edades más tempranas. En el grupo de edad de 15 a 19 años, el 19.3 % de las mujeres y 7.2% por ciento de los hombres ya han dejado de ser soltera o soltero.

En las regiones más tradicionales, que corresponden en su mayoría a los municipios indígenas, 20.2% de las mujeres y 7.3 % de los hombres indígenas en este rango de edad [15,19] ya se unió o casó alguna vez. En los municipios con presencia indígena vive 17.7% de las mujeres indígenas y 7.0 % de los hombres unidos, mientras que en los municipios con población indígena dispersa el porcentaje alcanza el 19.3% y el 7.1%  para mujeres y hombres indígenas, respectivamente. Para las mujeres las entidades donde la unión es más temprana son Nayarit, Sinaloa y Nuevo León, seguidas de Michoacán y Chihuahua. Para los hombres son las entidades de Michoacán, Zacatecas, Nuevo León, seguidos de Baja California Sur y Sinaloa.

[1] Fuente: Serrano, E., A. Embriz y P. Fernández, Indicadores socioeconómicos de los pueblos indígenas de México, 2002, México, INI-PNUD-CONAPO 2002.