El subsecretario de Derechos Humanos, Población y Migración, Alejandro Encinas Rodríguez, Jefe de la delegación mexicana que participa en la Cumbre de Nairobi sobre el 25° Aniversario de la Conferencia Internacional de Población y Desarrollo (ICPD25), refrendó el compromiso del Gobierno de México de garantizar a las mujeres el acceso a una vida libre de violencia y establecer una política de población con sentido humanista que fomente el desarrollo para abatir la brecha de desigualdad.

El subsecretario Encinas explicó que se implementarán acciones para la identificación temprana de la violencia sexual contra niñas, niños y adolescentes, así como mecanismos de prevención y atención de la violencia de género que influyan de manera efectiva en contener y eliminar el feminicidio.

Ante jefas y jefes de Estado, ministras, ministros, líderes de opinión, mujeres y hombres jóvenes, representantes del sector empresarial y académico, Alejandro Encinas indicó que se fortalecerán las políticas públicas para disminuir la mortalidad materna y eliminar los fallecimientos por abortos inseguros.

Por otra parte, se buscará que se garantice el acceso a la atención integral, a anticonceptivos de emergencia y de interrupción legal del embarazo, respetando la dignidad, autonomía, integridad y libertad de las mujeres.

Destacó que, en materia de igualdad de género, derechos sexuales y reproductivos, se tiene que consolidar la Estrategia Nacional para la Prevención del Embarazo Infantil y Adolescente, pues reconoció que los componentes de violencia son críticos, principalmente en el caso de embarazos de niñas, donde las responsabilidades recaen directamente en el Estado.

Por su parte, la presidenta del Instituto Nacional de las Mujeres, Nadine Gasman, enfatizó que el gran reto para lograr cambios sustantivos para erradicar la violencia contra las mujeres, es promover un verdadero cambio cultural en las sociedades.

Al participar en el panel “Acelerar la acción para poner fin a la violencia contra las mujeres y las niñas”, Nadine Gasman agregó que “erradicar las violencias contra las mujeres y las niñas implica cambios en los estándares sociales y en las actuaciones de las instituciones nacionales y locales, así como marcos regulatorios y de políticas públicas adecuados de servicios básicos”.

Como parte de los compromisos que México adquiere durante la Cumbre, es prioridad para el país otorgar educación sexual integral desde la infancia en todos los niveles educativos públicos. Lo anterior, con el fin de favorecer la adquisición gradual de información y de los conocimientos necesarios para el desarrollo de habilidades y actitudes apropiadas para vivir una vida plena y saludable.

Dado que la estructura demográfica en México se mueve hacia una población envejecida y con una diversidad de estructuras familiares, se adelantó que para 2024 el Estado mexicano se compromete a implementar políticas que conduzcan a la conciliación de la vida laboral y familiar, con igualdad de oportunidades y perspectiva de género, a fin de contribuir en la distribución del trabajo doméstico, los cuidados y la crianza.