La presidenta del Inmujeres, Nadine Gasman, así como la directora general de autonomía y empoderamiento para la igualdad sustantiva, Marta Ferreyra y la representante en México de ONU Mujeres, Belén Sanz participaron en el Women Economic Forum (WEF, por sus siglas en inglés).

El contexto económico a nivel mundial se vio paralizado a consecuencia de la pandemia por la covid-19, en donde en repetidas ocasiones se ha mencionado que las mujeres y niñas fueron las más afectadas en todos los niveles; políticos, sociales, familiares, culturas y particularmente económicos. El empleo femenino es el más afectado por la emergencia sanitaria puesto que al tener que repartirse las tareas del hogar junto con las del trabajo muchas tuvieron que abandonar sus actividades para priorizar otras: las de cuidados.

Por ello Nadine Gasman, recalcó la importancia de trabajar por un Sistema nacional de Cuidados como vía para la inclusión laboral de las mujeres como una oportunidad para la igualdad de género en donde las mujeres y niñas de nuestro país logren tener una calidad de tiempo favorable que les permite el crecimiento personal.  Remarcó que la tasa de participación laboral de los hombres es de 76% mientras que las de las mujeres es de 44% “trabajamos más, pero ganamos menos, pues el trabajo en el hogar pocas veces es remunerado”, remarcó.

La pandemia acabo con fuentes de ingresos solidas en los hogares. 1.6 millones de personas se quedaron sin trabajo, el 84% eran mujeres, de acuerdo con el INEGI, mencionó la representante de ONU Mujeres , Belén Sanz y comentó que en toda Latinoamérica el 77% de los hombres tiene un trabajo remunerado mientras que las mujeres cuentan con el 54%. Por ello celebra y comparte que la idea de un Sistema nacional de cuidados en México podría ser una gran oportunidad para acabar con las brechas económicas de género en donde las mujeres podrán alcanzar otros espacios que les han sido negados por el sistema patriarcal instaurado culturalmente.

 Por su parte Marta Ferreyra hizo un llamado para darnos cuenta que por muchos años la división sexual del trabajo ha sido normalizada y perpetuada. “Por lo que es necesario cambiar esa mentalidad en todas las generaciones, pero con especial énfasis en las infancias quienes deben de crecer libres de perjuicios y estereotipos en los que se remarca la idea de que el tema de los cuidados solo es un tema de mujeres, sino que se trata de una responsabilidad compartida”  

El modelo de ese sistema de cuidados tiene tres aristas; recalcó Nadine Gasman:

1.- Entender que el cuidado se refiera a una actividad cotidiana donde se incluye el cuidado de niñas y niños, adolescentes, personas adultas mayores y con discapacidad. En donde el Estado debe poner atención pues se trata de un bien público y debe entenderse como el derecho a las personas a ser cuidadas.

2.- Autonomía económica la cual pretende liberar el tiempo de las mujeres para que en un futuro impulse el crecimiento económico.

3.- Concebir los cuidados teniendo impacto en la seguridad y la paz “pues sabemos que quien construye empatía también construye paz”

“Debemos ver esto como un vector de desarrollo de paz que permite transformar volviendo más igualitarios todos los espacios en donde convivimos todas y todos,” manifestó Marta Ferreyra.

Para concluir la presidenta del Inmuejres señaló que “No es un trabajo sencillo, las sinergias cuestan trabajo de hacerse y las resistencias son muchas es por ello que en el Inmujeres queremos manifestar que se está trabajando duro para que el Sistema nacional de cuidado sea una realidad en nuestro país con el fin de contribuir a un mundo más igualitario”.