De acuerdo con la Organización de las Naciones Unidas (ONU), las mujeres son las más afectadas por el cambio climático si se toma en cuenta que “la discriminación que aún sufren a nivel socioeconómico intensifica las consecuencias que el calentamiento global está teniendo sobre su alimentación, hogar y medios de vida”.[1]

Asimismo, “las normas machistas también impulsan a los hombres a la violencia cuando se ven enfrentados a los impactos del clima, por lo que comprender la interconexión entre el bienestar económico, la paz y la igualdad de género es vital para garantizar un futuro mejor para el planeta y toda la humanidad”.[2]

En este contexto y para cerrar las brechas de desigualdad, el Instituto Nacional de las Mujeres (Inmujeres) impulsa la perspectiva de género en las políticas medio ambientales y para enfrentar el cambio climático. En este sentido, el Inmujeres es una institución participante en el Programa Especial de Cambio Climático (PECC) 2021-2024, y, en su capacidad de integrante a la Comisión Intersecretarial de Cambio Climático ha participado en la elaboración del PECC 2021-2024, mismo que fue publicado el lunes, 8 de noviembre de 2021 en la edición vespertina del Diario Oficial de la Federación.

De acuerdo con el Panel Intergubernamental sobre Cambio Climático (IPCC), la vulnerabilidad se define como el grado en que los sistemas “pueden verse afectados adversamente por el cambio climático”, dependiendo de si éstos “son capaces o incapaces de afrontar los impactos negativos del cambio climático”[3], incluyendo en esta definición a la variabilidad climática y los eventos extremos.

Con base en esta definición, la vulnerabilidad no sólo depende de las condiciones climáticas adversas, sino también de la capacidad de la sociedad de anticiparse, enfrentar, resistir y recuperarse de un determinado impacto. De esta manera, la vulnerabilidad de una sociedad está determinada por su exposición a los eventos climáticos, por su capacidad de respuesta y por sus capacidades institucionales y sociales.

La vulnerabilidad de las poblaciones también es determinada por sus condiciones social, como la pobreza, el acceso a los recursos naturales y a puestos de toma de decisiones. Según datos del Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (CONEVAL), en 2018 se encontraban en situación de pobreza el 42.4% de las mujeres y 41.4% de los hombres. Estos niveles de pobreza se amplifican en localidades rurales, donde se estima que 55.9% de las mujeres y 54.7% de los hombres viven en condiciones de pobreza[4].

Asimismo, las mujeres en México enfrentan condiciones desfavorables para su participación en el ámbito rural. El escaso acceso a la propiedad de la tierra agraria plantea un obstáculo fundamental para que las mujeres se constituyan en beneficiarias de opciones productivas y apoyos gubernamentales[5].

Igualmente, en el ámbito rural las mujeres padecen en mayor medida la precariedad y bajo acceso a los servicios, infraestructura y equipamiento, ya que son ellas las que se han encargado de invertir más horas y esfuerzo para que las y los integrantes del hogar tengan acceso a ellos, lo que se suma a las jornadas dedicadas a las labores domésticas y de cuidados que les han sido asignadas socialmente[6]. Lo anterior se traduce en una falta de tiempo de las mujeres rurales que, adicionalmente, enfrentan escaso acceso a créditos productivos y a bienes de producción, lo cual genera desventajas para su participación económica en condiciones de igualdad y sostenibilidad.

Considerando las problemáticas mencionadas, y en aras de fortalecer la transversalización de la perspectiva de género en la política pública de cambio climático, el Inmujeres propuso dos líneas de acción susceptibles de ser incorporadas en el PECC 2021-2024, mismas que se encuentran en la versión final de Programa:

4.7.6 Generar mecanismos y metodologías para transversalizar el enfoque de género en los instrumentos de política pública nacionales y estatales sobre cambio:

 

Acción Puntual

Tipo de Acción Puntual

Dependencias y/o Entidades responsables de instrumentar la Acción puntual (instituciones coordinadas)

Dependencia o Entidad coordinadora

(encargada del

seguimiento)

4.1.4 Realizar procesos de consulta vinculando a las áreas del sector ambiental responsables de ordenamiento territorial, gestión integral de riesgos y cambio climático, con organizaciones y grupos de mujeres que se encuentran trabajando en estos temas que permitan el diseño y fortalecimiento de políticas públicas.

De coordinación

SEMARNAT

INECC

SEMARNAT

4.7.6 Generar mecanismos y metodologías para transversalizar el enfoque de género en los instrumentos de política pública nacionales y estatales sobre cambio climático, a fin de coadyuvar en el cumplimiento de compromisos nacionales e internacionales en la materia.

De coordinación

SEMARNAT

INECC

SEMARNAT