La tecnología se ha convertido en una parte cada vez más esencial de todos los aspectos de la existencia humana, impactando a la educación, empleo, política y a la creatividad por lo que la capacidad de acceder, navegar y moldear las tecnologías es crucial para la participación de las mujeres en todos los ámbitos de la sociedad.
Sin embargo, en cuanto al acceso a las tecnologías de la información, las mujeres también enfrentan desigualdades importantes.
En 2011 la ONU declaró el acceso a Internet como un derecho humano básico. Sin embargo, para finales de 2013, sólo el 40 por ciento de la población mundial contaba con acceso a Internet. Las mujeres acceden al uso de las nuevas tecnologías de manera más lenta y más tarde que los hombres, con un estimado de 200 millones menos mujeres que hombres en línea en 2014. Si no se hace nada para solucionar esta brecha, se proyecta que para 2017 este número podría ser de 350 millones.
Los programas enfocados en incrementar el acceso de las mujeres a las tecnologías de la información tienen un amplio potencial para empoderar a las mujeres, especialmente entre las mujeres que viven en comunidades rurales.
El uso de las TIC fomenta y promueve diferentes modelos de enseñanza y aprendizaje que resultan prácticos, funcionales y participativos. Asimismo, posibilitan el acceso a nuevos trabajos y profesiones, la participación en iniciativas de aprendizaje interactivo, y el acceso a conocimientos e información para empoderar y mejorar sus vidas.
Para aprovechar el potencial que tienen las TIC para empoderar a las mujeres, es necesario incorporar la perspectiva de género para tener en cuenta la situación y las necesidades de las mujeres.
Si se logra que más jóvenes estudien y trabajen en carreras relacionadas con las TIC, la meta de alcanzar la igualdad de género y contar con un planeta “50-50” podría no tener que esperar hasta el 2030.
¡Queremos que más mujeres se interesen en carreras de ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas!
Pink Hawks es el primer equipo femenil de México en participar en FIRST Robotics Competition, un deporte de la mente en donde grupos de estudiantes compiten para construir y programar un robot de tamaño industrial para que compita en un campo de juego contra el robot de los demás equipos.
Pink Hawks Busca promover la participación de las mujeres en STEM (Science, Technology, Engineering and Math). ¡Eso es lo que necesitamos en México!
