Como una manera de reconocer la trayectoria de los investigadores y ex directores del Instituto Nacional de Investigaciones Forestales, Agrícolas y Pecuarias (INIFAP), Dr. Jesús María Moncada de la Fuente y Dr. Antonio Turrent Fernández, se develaron las placas del Auditorio y el Salón de Usos Múltiples, que llevarán sus nombres para la posteridad.
El director general del INIFAP, Dr. José Fernando De La Torre Sánchez, explicó que la iniciativa condecora años de investigaciones, aportaciones y formación de recursos humanos para el sector primario del país. Los investigadores, son insignia de esfuerzo y entrega al campo mexicano, enfatizó.
Al tomar la palabra, el Dr. Jesús María Moncada, compartió su emoción y agradeció la presencia de quienes representan el desarrollo de México y el mundo. Mencionó el apoyo recibido por el secretario de Agricultura y Desarrollo Rural (SADER), Dr. Víctor Villalobos Arámbula, del Dr. De La Torre y la comunidad del Instituto, recordó que a nivel global se vive crisis alimentaria, financiera, energética y ecológica, agravada por el cambio climático y que, en México, el reducido crecimiento económico, la pobreza y los desafíos que enfrenta la agricultura, conllevan a la revaloración de esta actividad que genera empleo y alimento, misma, que requiere de la participación de los jóvenes y la responsabilidad del gobierno y la sociedad.
Dijo que es necesario promover la interinstitucionalidad, fomentar y diversificar la agricultura, hacer productivo el conocimiento, actualizar el Sistema Nacional de Investigadores y crear el Sistema Nacional de Innovadores. Además, iniciar estrategias de identificación y desarrollo de nuevas oportunidades de negocio como pesqueros, silvícolas, servicios ambientales y bonos de carbono, entre otros, así como impulsar la red de innovación y desarrollo participativo con profesionistas que generen proyectos productivos y sustentables.
Habló del trabajo de los extensionistas, y recalcó que la agricultura productiva contribuye a la seguridad alimentaria, por lo que su evolución es el motor de desarrollo sostenible que demanda la colectividad. Apoyar el campo mexicano es clave en la estrategia de combate a la pobreza, y el INIFAP es una institución estratégica para el país, de la que se tienen que aprovechar sus aportes.
Por su parte, el Dr. Antonio Turrent Fernández, agradeció a su familia, amigos y compañeros de trabajo. Comentó que, en 1985, al ser vocal ejecutivo del INIFAP, aprendió que se tenía que continuar la coordinación de los institutos agrícola, pecuario y forestal, en su labor en el país, cubriendo los objetivos de cada uno con igual importancia, de manera integrada.
Enunció que en los tres años que fue vocal ejecutivo, los productores e investigadores reorganizaron el INIFAP, retomaron las Redes de investigación, y se innovó en los trabajos regionales. Expuso que la entonces autoridad de la Secretaria de Agricultura y Recursos Hidráulicos, preveía fraccionar al Instituto en cada una de las delegaciones que tenía, pero que, al implicar la desaparición del Instituto, uno de los investigadores señaló que el INIFAP debía organizarse en estados y dedicar un científico a la comunicación con la Secretaría, una alternativa que liberó al Instituto de extinción.
Declaró que los proyectos regionales y estatales son importantes, y que las problemáticas tienen que estudiarse con visión para lograr soluciones de las situaciones que se pueden presentar. La tecnología y los procedimientos serán obsoletos en los años por venir, por lo que hay que priorizar en tecnologías que atiendan las necesidades que se observan para el futuro. Además, hay que retomar los conocimientos de los ancestros que son mensajes genéticos para enfrentar la sequía y otras complicaciones.
Lo que el país necesita del INIFAP, dijo, es ese equipo organizado de investigadores a nivel nacional que continúen el trabajo de los Programas Nacionales, mismos que tienen que estar conectados con los Centros Nacionales de Investigación Disciplinaria (CENID), y destaquen la atención en la problemática de los estados como incendios, sequia, proteínas de alta calidad, donde los productores requieren ayuda, por ello, consideró la creación de un CENID para la sequía. Expresó que profundizar en una disciplina y transmitir a los jóvenes estudiantes la enseñanza de los tutores experimentados en el campo formará investigadores con bases sólidas que podrán dimensionar las aportaciones en solución de los problemas actuales.
Los Doctores recibieron una réplica de las placas develadas, mismas que nombran desde este día, al Auditorio de Oficinas Centrales “Dr. Jesús Moncada de la Fuente” y el Salón de usos múltiples “Dr. Antonio Turrent Fernández”.
El mensaje final y clausura fue ofrecido por el director general de Desarrollo de Capacidades y Extensionismo Rural de la SADER, Dr. Felipe de Jesús Legorreta, en representación del encargado de despacho de la Subsecretaria de Desarrollo Rural, Dr. Salvador Fernández Rivera, quien indicó que el homenaje a los investigadores rinde honor a los mentores, asesores, directivos y líderes de proyectos, que han enseñado a generaciones y que dejan un legado para los futuros científicos y extensionistas. Deseó muchos años más de aportaciones para México y agradeció ser parte del festejo de dos baluartes de la ciencia y la tecnología del campo.
Asistieron, el director general del Servicio Nacional de Inspección y Certificación de Semillas (SNICS), Dr. Leobigildo Córdoba Téllez, el coordinador nacional de la Comisión Nacional para el Conocimiento y Uso de la Biodiversidad (CONABIO), Dr. José Sarukhan Kérmez, directivos de las Facultades de Estudios Superiores (FES) Aragón y Acatlán de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), así como representantes del Servicio Nacional de Sanidad, Inocuidad y Calidad Agroalimentaria (SENASICA), autoridades de los Centros de Investigación Regional (CIR) y CENID del INIFAP, el Dr. Jorge Cadena Iñiguez, y el Dr. José Isabel Cortez Flores, entre otros importantes miembros de instituciones afines.