Con el propósito de producir quinua en los Valles Altos de México, el Instituto Nacional de Investigaciones Forestales, Agrícolas y Pecuarias (INIFAP) recomienda algunos métodos estables para cultivarla en la zona centro de México como la preparación del terreno, variedades recomendadas y métodos de siembra.

Las variedades mejor adaptadas son de la ciudad de Puebla, se han sembrado variedades como la Salcedo INIA y otras que las nombran solo por el color de la semilla. En el INIFAP se ha trabajado en la evaluación de germoplasma, en Boyeros y Santa Lucía de Prías y Temamatla en el Estado de México, en Cuapiaxtla y Nanacamilpa, Tlaxcala y en San Juan Amecac, Puebla de 2014 a 2022, y se han identificado las variedades Suyana y Tarpuna.

La quinua últimamente ha sido popular debido a sus beneficios y propiedades nutricionales, ya que presenta una proteína de alta calidad biológica y otros compuestos como péptidos y otros antioxidantes que aportan beneficios importantes a la salud, otra característica es que no tiene gluten por lo que es una opción para personas con intolerancia al mismo.

El cultivo se adapta a diferentes climas a altitudes cercanas a los 4 mil hasta el nivel del mar donde otros cultivos no prosperan, tiene una alta resistencia a sequía. Algunas variedades toleran salinidad -similar al agua de mar-. Este cultivo también resistente a heladas, en sus primeras etapas algunas variedades resisten temperatutas de -4 oC. En México se realizan siembras poco satisfactorias, por lo que el INIFAP generó un paquete de recomendaciones para la producción de quinua.

Se recomienda sembrar en verano al inicio de las lluvias, en suelos francos, franco-arenosos y franco-arcillosos, pues emergen más rápido de lo normal. El barbecho debe hacerse de tal forma que favorezca la infiltración y retención de agua.

INIFAP cuenta con recomendaciones tecnológicas que explican detalladamente la preparación del terreno (rastreo y surcado), la rotación de cultivos con maíz, frijol, papa, cebada, haba, trigo, frijol, maíz, avena y haba), métodos de siembra (manual y mecanizada), entre otros sistemas.

Además, entre las acciones que sobresalen están el almacenamiento y manejo poscosecha donde el grano es almacenado en un lugar fresco y seco, posteriormente se deben eliminar las saponinas -compuestos que no pueden consumirse y que dan un sabor amargo-  se pueden quitar de forma artesanal, frotando hasta eliminar la cáscara, y después lavar, la quinua entonces estará lista para su consumo o venta comercial, indican en el INIFAP. Este proceso también pude realizarse de manera mecanizada con una escarificadora de grano.

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Suyana

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Tarpuna

https://vun.inifap.gob.mx/BibliotecaWeb/_Content?/=4165