“La ignorancia es la mayor vulnerabilidad con que nos podemos enfrentar”, expresó la Dra. Amparo Martínez Arroyo, Directora General del Instituto Nacional de Ecología y Cambio Climático (INECC), en el Marco del Día Mundial del Medio Ambiente, conmemorado el pasado 05 de junio.

Durante la conferencia virtual organizada por la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), Martínez Arroyo destacó que el Gobierno de México debe de tener sus propios organismos de análisis e integración de la información sobre problemas públicos y contar con la mejor información sobre los procesos que causan el deterioro e incluso desaparición de nuestros recursos naturales así como las posibles soluciones y acciones para evitarlos.

El medio ambiente, el agua, la biodiversidad, el manejo de los bosques y de los ecosistemas costeros, marinos, terrestres, tienen que ser abordados por los gobiernos con la mejor información disponible, generada por diversos sectores a nivel local, nacional e internacional.

Por ello, durante su intervención, resaltó la importancia que tienen las instituciones de investigación para el país, como la Comisión Nacional para el Conocimiento y Uso de la Biodiversidad (CONABIO), el Instituto Mexicano de Tecnología del Agua (IMTA) y el INECC.

Los institutos de investigación del sector ambiental -señaló- están comprometidos a desarrollar y compilar investigación científica, y a divulgarla de manera accesible para que sea útil para la toma de decisiones y para fortalecer las capacidades de la ciudadanía en general, lo cual repercute en el bienestar de la población.

El trabajo científico que realizan las tres instituciones brinda diferentes “marcos de pensamiento y conocimiento y múltiples perspectivas para comprender los problemas ambientales y sociales en su complejidad creciente, lo cual permite contar con recursos sólidos de legitimidad para el diseño, acompañamiento e implementación de acciones y políticas gubernamentales”, señaló.

Además, remarcó que el conocimiento científico es universal, sin embargo, es responsabilidad del Estado contar con información confiable de los procesos que ocurren a distintas escalas en el territorio mexicano y que pueden tener una incidencia pública.

“Hay mucho que hacer en este tema, pero se requieren recursos financieros y humanos calificados, por lo que el presupuesto público es esencial. Todas las dependencias ambientales constituyen parte importante del patrimonio de este país, pero son un patrimonio lastimado por el que tenemos que trabajar todos los mexicanos”.

Finalmente, concluyó su participación enfatizando que el sector ambiental a nivel federal, estatal, municipal y comunitario debe ser fortalecido e integrado a todos los planes de desarrollo a fin de lograr el México con justicia social y ambiental, incluyente y próspero que anhela el pueblo mexicano.