Título: "Can wildlife management units reduce land use/land cover change and climate change vulnerability? Conditions to encourage this capacity in Mexican municipalities" (¿Pueden las Unidades de Manejo de Vida Silverstre (UMA) reducir el cambio de uso de suelo y cobertura, y la vulnerabilidad al cambio climático?)
Colección: Journal "Land Use Policy", Volumen 64, Mayo 2017.
Autores: Laura Gómez Aíza; Andrea Martínez Ballesté; Leonel Álvarez Balderas; Alicia Lombardero Goldaracena; Paola M.García Meneses; Margarita Caso Chávez; Cecilia Conde Álvarez.
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Abstract en español (T. Laura Gómez Aíza):
Las Unidades de Manejo de Vida Silvestre extensivas (UMAe) son instrumentos de política ambiental nacional, diseñados para promover la conservación de los ecosistemas y el desarrollo rural a través del uso sostenible de la biodiversidad. Sin embargo, no existen evidencias contundentes de su contribución en la conservación de la cobertura vegetal y se desconoce su potencial como estrategia para hacer frente al cambio climático. En este estudio se analizan los patrones generales de cambio de cobertura de la vegetación (CCV) y su relación con las UMAe a lo largo del país y se examinan las fortalezas y debilidades de las UMAe para hacer frente al cambio climático. Para ello se calculó el porcentaje de CCV entre 2002 y 2011 (Series III y V de INEGI), y el porcentaje de área con UMAe (base de datos de DGVS-SEMARNAT) para cada municipio del país (2456 en total). Con estos datos generamos grupos de municipios de acuerdo con su porcentaje de UMAe, realizamos la prueba de Kruskal-Wallis para encontrar diferencias estadísticamente significativas en el CCV y realizamos comparaciones entre grupos con la prueba pos hoc de Dunn. Hasta diciembre de 2013, el 37% de los municipios tenía UMAe, mientras que entre 2002 y 2011 el 64% presentaron CCV. Doce municipios que han sido catalogados como muy vulnerables al cambio climático (PECC, 2014) perdieron más del 10% de vegetación entre 2002 y 2011, por lo que son municipios doblemente expuestos y prácticamente no tenían UMAe en su territorio. Asimismo, en general, los municipios con menos del 10% de su área con UMAe experimentaron mayores pérdidas de vegetación en comparación con los que tenían más del 10% con UMAe (H = 14.15, g.l. = 3, p = 0.003). Estos resultados sugieren que al aumenta las áreas municipales bajo el esquema de UMAe se reducen las tendencias de CCV y esto es particularmente importante en municipios con doble exposición; sin embargo, es importante considerar que el éxito de las UMAe depende de muchos factores: ecológicos, económicos y socioculturales. Además, esos factores pueden estar impulsando el CCV, por tanto, es necesario realizar esfuerzos adicionales para mejorar nuestra comprensión de los procesos ecológicos y climáticos locales/regionales, usar una metodología estandarizada para monitorear los hábitats y especies, incorporar en la planeación, implementación y monitoreo de las UMAe a la diversidad biológica, cultural, económica e institucional de la región y también se deben establecer acuerdos para fortalecer la organización social y el capital humano locales. Tomando todo esto en cuenta, pensamos que aumentar el número y la interconexión de las UMAe a nivel municipal puede ser una estrategia eficaz para controlar el CCV y reducir la vulnerabilidad de los municipios a los impactos del cambio climático.