De acuerdo con Ana Valeria Pérez Lemus, Consultora y asesora en materia de género, el vínculo entre mujeres y agua es indiscutible, sobre todo en el medio rural donde ellas proporcionan prácticamente toda el agua, acarreándola, almacenándola y administrándola ya que saben cuanta agua se ocupa en sus hogares, de igual forma, conocen donde están las fuentes de agua, los horarios de servicio de las llaves públicas y a qué hora llegan las pipas con el líquido, “mientras que los hombres tienen asignadas tareas en el espacio público y por ello no tiene una relación dentro del hogar con el agua”.

No obstante, la inequidad en la gestión de este suministro vital es una realidad que acompaña a la sociedad en diversas regiones donde el rol de la mujer es comúnmente ignorado, no solo en México sino en el mundo. Así lo refirió durante su participación en la Mesa de Diálogo ‘Mujeres y agua, uso, gestión y acceso al líquido vital’, organizada por el Instituto Nacional de Desarrollo Social (Indesol), luego de exponer que las mujeres para conseguir el agua suelen organizarse, ya que buscan satisfacer las necesidades que hay dentro del hogar, “pero esta organización y participación de las mujeres no tiene lugar en lo público y esto sigue siendo un motivo para violentarlas, porque este laborioso trabajo pasa a manos de los hombres sin considerar que las mujeres salen por el agua ya sea de madrugada o muy noche para saciar esa necesidad y poder tenerla en sus hogares, y esto ocurre tanto en zonas rurales como urbanas”.

La activista considera importante tener una perspectiva de género en la gestión de los recursos naturales como lo es el agua, para ello, “el estado tiene la obligación de garantizar los derechos humanos de su población, supliendo las necesidades particulares de las mujeres relacionado al tiempo que dedican en el proceso de gestión y generar políticas públicas a consecuencia”. “Hoy en día las mujeres organizadas y empoderadas han decidido llevar sus temas al espacio público y es justo ahí donde la agresión hacia la mujer se incrementa, recordemos que en 2018, 17 mujeres defensoras del medio ambiente fueron asesinadas en América Latina por hombres y 2 de ellas eran mexicanas”, agrego.

Finalmente comentó que los funcionarios públicos tienen la tarea de escuchar a las mujeres y sus necesidades para que ellas también sean participes de las decisiones que se están tomando en el espacio público, reforzando así los foros de consulta donde se asignaron tareas muy específicas a Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (SEMARNAT) y a Conagua para la relación que tienen las mujeres con el agua.

Contacto anavalerialemus@gmail.com o marcar al teléfono: 55-23-09-52-72.

Compartimos enlace de acceso a Mesa de Diálogo https://www.youtube.com/watch?v=mu_vnNbE9n8

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029/2021