De acuerdo con Mercedes González Almaguer, integrante de la Dialéctica Altruista AC, es necesario resaltar y reconocer en las personas cuidadoras la importancia de su trabajo, ya que deben afrontar situaciones que afectan su bienestar emocional y físico, en primer lugar, por los horarios de trabajo y por su carga laboral, además este tipo de actividad tiene rostro femenino, explicó durante su participación en la Mesa de Diálogo ‘Personas cuidadoras. Una nueva perspectiva después de la pandemia’, organizada por el Instituto Nacional de Desarrollo Social (Indesol).

Datos del Instituto Nacional de Geografía (INEGI), indican que el trabajo no remunerado de los hogares en México equivale a 5.5 billones de pesos es decir 23.5% del Producto Interno Bruto (PIB), así mismo las mujeres aportan 76.4% del tiempo que se requiere en un hogar para esa actividad en la que se icluye el cuidado de las personas y el cual no recibe ninguna contribución.

La experta en cuidados comentó que cuando el trabajo de cuidado no remunerado es realizado por un miembro de la familia, generalmente de la abuela, tía o algún soltero, puede ser de buena calidad, hay buen trato, un compromiso e interés en la persona que cuida, pero no es profesional, sin embargo, “la tarea de cuidados requiere de aprendizaje constante el cual se da de manera informal porque se va aprendiendo sobre la marcha y según las necesidades de quien es cuidado”.

El trabajo de cuidados por considerarse en la esfera de lo privado no es remunerado sino una obligación, siendo una sobrecarga de tareas en deterioro de su propia salud y de igual forma se cataloga como un deber de género, “ya que a las mujeres se les asocia con la intimidad, vulnerabilidad, emotividad, prestar ayuda, dar de comer y cuidar de los menores”, por ello, “el trabajo doméstico ha sido llamado el trabajo invisible porque no forma parte del sistema de seguridad social ni es tomado en cuenta en las cifras económicas oficiales de los gobiernos”, expuso.

Agregó que “el trabajo de cuidados puede llegar a generar codependencia que provoca estrés, angustia, miedo, incertidumbre y desesperanza” Por ello se considera importante visibilizar, valorar y considerar todo el esfuerzo y dedicación que se les da a las personas, “reconociendo las tareas de cuidado como eje vertebral de las desigualdades por ejemplo, reduciendo carga de trabajo, horas no remuneradas y redistribuir las tareas incluyendo a la familia completa además de contar con redes de apoyo”.

Finalmente dijo que es importante que las personas cuidadoras cuiden de su propia salud, tengan horas de descanso, que se respete su opinión, que tengan un tiempo libre, pero a su vez sepan poner sus límites, expresar sus necesidades hacia los demás y sobre todo saber pedir ayuda. Para más información pueden mandar un correo a: transerdis1@gmail.com o xquenda2@yahoo.com.mx

Compartimos link de acceso a la Mesa de Diálogo https://www.youtube.com/watch?v=6yi2Rz_eQEY

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110/2020