• El Inapam promueve la igualdad e inclusión al sector productivo
• Se han conseguido 20 mil oportunidades laborales

Guadalupe Garduño Marmolejo nació en 1940, desde muy joven desarrolló la afición por el arte, se casó y tuvo cuatro hijos pero no imaginó lo que la vida le deparaba, enviudó y sola comenzó a luchar para sacar adelante a sus pequeños, trabajó como auxiliar de contador en una línea aérea ecuatoriana y al mismo tiempo realizaba composturas de ropa para obtener mayores ingresos.

En 1965 decidió tomar clases de pintura en el IMSS y posteriormente en Bellas Artes. Enfrentó en muchas ocasiones problemas económicos pero al cumplir 60 años se inscribió en el Centro Cultural San Francisco del Instituto Nacional de las Personas Adultas Mayores, fue ahí donde aprendió el taller de vitral y su permanencia en él durante 11 años ha sido porque, comentó: “No sólo recibo un beneficio económico al vender las piezas que aprendo a hacer aquí, sino la satisfacción personal es aún mayor.”

Aprender un oficio, un arte o un taller se ha convertido en una opción laboral para las personas adultas mayores, pues a través de la venta de los objetos que realizan logran apoyar su economía.

El Inapam lleva a cabo el programa de Capacitación para el Trabajo y Ocupación del Tiempo Libre, en el que implementa alternativas de adiestramiento para la creación de artículos de diversa índole, ya sea para el autoconsumo o para la producción a pequeña escala, con el objetivo de que este sector de la población se sienta útil y obtenga un ingreso extra.

Los talleres que se imparten en clubes y centros culturales del Inapam son: bisutería, grabado, bordado, talla en madera, pintura en cerámica, joyería, pintura, pirograbado y vitral.

La señora Lupita habló de su experiencia al lograr convertir una afición en un negocio: “La decisión de inscribirme al curso fue, en un principio, porque me gustan mucho las lámparas de vitral y al tener dificultad para adquirirlas opté por hacerlas yo misma, poco a poco las personas fueron observando mis objetos y comenzaron a comprarlos, ahora mi proyecto es crearlos para venderlos.”

“Hacer mis piezas ya es un negocio para mí, hago productos de temporada para Navidad, 10 de mayo, Día del Padre, portarretratos, porta velas, etcétera, algunos son adquiridos por gente que ya me conoce y en ocasiones también los exhibo en el auto de mi hija, con la venta recupero lo invertido, y me queda para cubrir mis necesidades y darme uno que otro gusto.”

Lupita no sólo vende productos de vitral, también obras de arte pictóricas, ha montado exposiciones en la delegación Benito Juárez y en el Museo Manuel Tolsá. Actualmente, transmite sus conocimientos dando clases a otros adultos mayores del centro cultural lo que la hace sentir productiva y feliz por la convivencia con sus compañeros.

De acuerdo con cifras del último censo de población realizado en 2010, cerca de 2 millones de adultos tienen ingresos de manera informal, por ello el Inapam promueve la igualdad de oportunidades laborales, donde resalta la experiencia, capacidades, responsabilidad y compromiso de los adultos mayores para que las empresas les abran sus ofertas de empleo.

Además la Secretaría de Hacienda ofrece como beneficio a los contribuyentes, personas físicas o morales que contraten adultos mayores en su plantilla laboral, el cual consiste en una deducción adicional a las previstas en la ley del ISR que permita disminuir de los ingresos del contribuyente por el ejercicio fiscal de que se trate, un monto adicional equivalente a 25 por ciento del salario pagado a personas que tengan 65 años o más edad.

A través del eje Seguridad Económica el Inapam impulsa acciones coordinadas con organizaciones e instituciones con el fin de elaborar y poner en marcha proyectos que redunden en un beneficio para este grupo etario.

La Bolsa de Trabajo del instituto se ha convertido en una importante plataforma para lograr la inserción de los adultos mayores en el campo laboral, en los últimos 3 años han colocado a 20 mil personas de 60 años o más en distintas áreas tales como: contador público, edecanes, atención telefónica, empacador voluntario, empleados de tiendas, recepcionistas, enfermeras, abogados, entre otros.