Es innegable que ambos sismos de septiembre no solo sacudieron nuestro país, si no que sacudieron desde los cimientos a una sociedad que hasta éste momento se ha visto envuelta en una profunda catarsis. A su vez, como nuestra sociedad en conjunto, la labor institucional entró en un entero estado de atención inmediata a la emergencia, toda la Administración Pública Federal se volcó a atender las necesidades desprendidas de la catástrofe y hoy día ya podemos hablar de cómo se comienza a ver la reconstrucción de nuestro amado México.
Retomando el pensamiento y rumbo institucional de la cooperación y haciendo énfasis en el estado de atención de la emergencia, cabe recalcar de manera muy especial que los logros alcanzados por todos los mexicanos son fruto de que codo a codo entre todos los individuos hemos formulado un nuevo esquema de comunidad, donde todos desde sus respectivos alcances, hemos abonado –en lo poco y mucho- a reconstruir nuestra patria.
Entonces, además de atender la emergencia continuamos con la articulación que abona a los grandes objetivos de la nación. Pues en este periodo introdujimos a la conversación pública ideas y acciones referentes a los derechos humanos desde los marcos municipales que están localizados en las fronteras, se continuaron los trabajos que ponen en camino los sistemas de formación al servicio público local.
A su vez, se continúan dando herramientas para las comunas que recién comenzarán sus periodos de gestión, asimismo, se abonó a los trabajos transversales para el cumplimiento de los objetivos globales y se generaron herramientas que tendrán a bien el fortalecer la realidad política a la que se enfrentan las munícipes de nuestro país.
Te invitamos a consultar este documento en el que se detallan las actividades que realizó el INAFED durante este periodo de tiempo.