Durante el año 2023 en el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) se han consolidado procesos para brindar una mejor atención médica a sus derechohabientes. Las cuatro reuniones regionales celebradas en los meses de abril y mayo se convirtieron en un espacio de diálogo vertical y horizontal, entre el nivel desconcentrado y el nivel central, para analizar los procesos operativos que respectivamente ejecutan.

 
Vertical porque desde nivel central se transmite al nivel desconcentrado un mismo tema desde diferentes enfoques, producto del trabajo transversal entre las direcciones normativas; y horizontal porque promueve un diálogo bilateral en territorio para compartir diagnósticos y responsabilidades, resolver problemas, perfeccionar procesos y generar metodologías que permitan trabajar en su reingeniería para mejorar la calidad de los propósitos institucionales.
 
Por ello, las reuniones regionales forman parte del impulso a la transformación institucional, al crear un ambiente de cooperación, trabajando como un gran equipo, fortaleciendo la identidad institucional, promoviendo la recuperación de la soberanía institucional, consolidando metodologías con esquemas colegiados y estableciendo directrices, protocolos y lineamientos.
 
Esta vez, el ejercicio de interacción se desarrolló en cinco mesas de trabajo específicas: Prestación de Servicios de Salud en el Marco Presupuestal; Abasto y Adquisiciones; Conservación; Personal; y Prestaciones Económicas y Sociales.
 
Al mismo tiempo, se delimitó una mesa con temáticas transversales: Infraestructura y Equipamiento; Control Interno; Transformación Digital; Juicios Fiscales; Incapacidades; Estrategias de Incorporación y Recaudación; Juicios Laborales; e IMSS-Bienestar.
 
Los trabajos partieron de un diagnóstico específico y regional en el que se logró analizar la congruencia del desempeño médico con el comportamiento presupuestal; se identificaron escenarios para facilitar el abastecimiento de medicamentos e insumos de manera permanente y suficientes; se revisaron elementos materiales y tecnológicos para garantizar la funcionalidad y seguridad de las instalaciones institucionales; se definieron estrategias para optimizar la ocupación de plazas vacantes; y se definieron directrices para combatir esquemas que dañan las finanzas institucionales a través del pago de incapacidades atípicas, cobro de pensiones a no derechohabientes, agravios y esquemas de defraudación fiscal derivados de juicios fiscales y laborales, entre otros temas relevantes.
 
El resultado fue la suscripción de 2,541 acuerdos, a los que se dará seguimiento durante los próximos meses para impulsar su cumplimiento previo a las siguientes reuniones regionales.