Dra. Ivonne Mejía Rodríguez.

Mujeres y hombres experimentamos a lo largo de nuestra vida diversos momentos de incertidumbre ante las enfermedades; sin embargo, uno de los desafíos más grandes que enfrentamos es la posibilidad de vivir con cáncer, un padecimiento que rompe con nuestras rutinas, relaciones y cambia nuestra perspectiva de vida.

Este octubre que recién iniciamos, en todo el mundo se conmemora el “Mes de Sensibilización sobre el Cáncer de Mama”, que busca incrementar la concientización sobre la importancia de una detección temprana porque hoy, gracias al avance de la medicina y a un tratamiento oportuno, no es inminente un desenlace fatal de la o el paciente.

En el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) sabemos que para incrementar las probabilidades de recuperación es fundamental detectar y diagnosticar la enfermedad en una etapa inicial, o, mejor aún, desde un enfoque preventivo, es clave que la población conozca que existen factores relacionados con los estilos de vida que están asociados con el desarrollo del cáncer de mama lo cuales podemos evitar o moderar en beneficio de la salud.

Esta campaña del Mes de la Sensibilización sobre el Cáncer de Mama es una iniciativa de la Organización Mundial de la Salud (OMS), a la que nos sumamos decididamente en el IMSS, enfocada principalmente en mujeres, pues este padecimiento es el que les afecta con mayor frecuencia.

La estadística en México y, en particular, en el IMSS, nos confirman el diagnóstico: el cáncer de mama ocupa el primer lugar por enfermedad oncológica en las mujeres y es también la principal causa de muertes respecto a los diversos tipos de cáncer femenino.

Actualmente, los esfuerzos para reducir la incidencia y la mortalidad por cáncer de mama han dado resultados, sin embargo, en el IMSS estamos convencidos de que, con información, chequeos regulares en programas como PrevenIMSS y estilos de vida más saludables, podemos salvar más vidas de mujeres.

DETECCIÓN TEMPRANA

Para hacer frente a este tipo de cáncer existen diversas estrategias que facilitan una detección temprana.

La primera y más cercana a cada mujer es la autoexploración mamaria que es una actividad que, se sugiere, deben practicar desde los 20 años cada mes.

El propósito es que cada mujer conozca sus senos y puedan identificar una normalidad, como sería un cambio en la forma, tamaño, coloración del seno o pezón. Los especialistas recomiendan adoptar la autoexploración como un hábito y efectuarse siete o diez días después de la menstruación, o seleccionar un día fijo en caso de no tener periodos menstruales.

Es fundamental hacer una correcta autoexploración y para ello el IMSS ofrece información en las Unidades Médicas Familiares y en general en sus hospitales. Los aspectos claves de la autoexploración que se deben conocer y poner en práctica son:

De pie

Inspección:

Frente al espejo observe sus senos, busque cambios en la forma, en el tamaño o en la superficie de la piel, especialmente inflamación, hundimiento del pezón, asimetría de las mamas, enrojecimiento o ulceraciones. Examínese en las siguientes posiciones:

a. Con los brazos a los lados.

b. Con las manos detrás de la cabeza y los codos ligeramente hacia delante.

c. Con las manos en la cintura y hombros hacia delante.

Palpación:

Busque bolitas, zonas dolorosas, abultamientos o consistencia diferente al resto de la mama, de la siguiente manera:

a. Frente al espejo o mientras se baña, levante su brazo derecho y ponga su mano en la nuca; con la yema de los tres dedos medios de la mano izquierda revise todo su pecho derecho, comience desde la parte superior y siga la dirección de las manecillas del reloj.

b. En la axila, busque zonas duras o dolorosas que no haya sentido antes.

c. Al final, apriete suavemente su pezón con la yema de los dedos para ver si hay salida anormal de líquido.

d. Explore el otro pecho de la misma manera.

Acostada

Palpación:

Busque zonas duras o la piel más gruesa, abultamientos o bolitas. No se debe olvidar palpar la zona de la axila y oprimir el pezón para saber si existe salida de secreción (salida de líquido) siguiendo los siguientes pasos:

a. Coloque una almohada pequeña, o toalla enrollada, debajo de su hombro derecho; coloque su mano derecha en la nuca y, con la mano izquierda, revise el pecho derecho, palpando de la misma manera que lo hizo estando de pie.

b. Haga lo mismo para explorar su seno izquierdo.

Las otras acciones médico-preventivas que ofrece el IMSS para la detección oportuna de cáncer de mama son: la exploración clínica de mama y la mastografía de tamizaje, las cuales son realizadas por personal médico y de enfermería capacitado en las unidades médicas.

La exploración clínica de mama es recomendable una vez al año para mujeres de 25 años y más. Consiste en la observación y la palpación de los senos, la cual es realizada por personal de salud (médico o de enfermería) capacitado, con el objeto de detectar alguna anormalidad que no haya sido percibida por la mujer durante la autoexploración.

Para este procedimiento se requiere estricta privacidad y que el personal de salud que la esté realizando se encuentre preferentemente acompañado por algún familiar de la paciente u otra persona de la unidad médica del área de la salud autorizada. Lo más importante es la tranquilidad de las derechohabientes.

La mastografía de tamizaje, es un estudio de rayos “X” de ambas mamas. Se dirige a las mujeres de 40 a 69 años, que no tengan signos ni síntomas sugestivos de cáncer de mama. La frecuencia del estudio es de cada dos años.

En caso de que una mujer tenga alguna alteración en las mamas, debe acudir directamente con el médico para su atención.

FACTORES ASOCIADOS CON EL CÁNCER DE MAMA.

Pamela, recibió el diagnóstico joven, antes de los 45 años y reconoce que a pesar de tener antecedentes familiares directos nunca quiso hablar de esta enfermedad y, en realidad, esta posibilidad nunca estuvo en sus reflexiones previas; sin embargo, una mañana de jueves la vida le cambio frente al espejo al detectar una bolita en su seno.

Hoy, recuperada, está al tanto de los factores que incrementan el riesgo de padecer cáncer de mama y que está en manos de cada persona moderarlos como son el sobrepeso, la obesidad, la alimentación rica en carbohidratos y baja en fibra, una dieta rica en grasas animales, sedentarismo y abuso en el consumo de alcohol y tabaco.

También es importante saber que existen factores asociados con el desarrollo de cáncer de mama, que no son modificables, pero que su conocimiento le permite a la mujer estar alerta y consultar al médico con regularidad y decidir si requiere alguna evaluación específica.

Entre estos destacan.

· Edad. El grupo de edad en el que se presentan más casos es en mujeres mayores de 50 años.

· Antecedentes personales. Si han enfrentado cáncer de mama, se tiene mayor riesgo de desarrollar cáncer en el mismo pecho o en el otro.

· Antecedentes familiares. Si algún miembro de la familia como madre o hermana tuvieron cáncer de mama, se tiene mayor probabilidad de padecerlo.

· Factores genéticos. Cuando los genes BRCA1 y BRCA2 presentan defectos, las mujeres tienen hasta un 80% de probabilidades de desarrollar cáncer de mama.

· Edad a la primera menstruación antes de los 11 años o la menopausia después de los 54 años.

· No haberse embarazado o tener hijos/as después de los 30 años.

· Densidad mamaria. Las mujeres con tejido mamario denso tienen mayor riesgo.

· Terapia hormonal después de la menopausia.

En los módulos PrevenIMSS de nuestro Instituto ubicados en las unidades médicas del primer nivel de atención, hay personal de salud capacitado para enseñar la técnica de autoexploración mamaria, así como para realizar la exploración clínica de mamas.

Es importante que se acuda con la Cartilla Nacional de Salud para verificar si le corresponde la mastografía de tamizaje y en tal caso enviarla al servicio de radiodiagnóstico.

Durante octubre, en el marco del mes de la Sensibilización del Cáncer de Mama, en las unidades médicas y los Módulos PrevenIMSS, se realizarán no solo las detecciones de cáncer de mama, se efectuarán ferias de la salud, eventos deportivos y foros con las medidas sanitarias y preventivas necesarias en el contexto de la pandemia por Covid-19.

Salir adelante después de un diagnóstico de cáncer de mama es posible, es una batalla que ha sido ganada por millones de mujeres en el mundo que pueden dar testimonio y esperanza de que vale la pena luchar.

Sin duda la familia y los seres queridos son fundamentales para superar estos complejos momentos, pero, antes que nada, cada mujer es su mejor aliada, así como el IMSS es aliado en la detección temprana del cáncer de mama.

Publicado en SDP Noticias.