El ingeniero Agustín Straffon Arteaga, director general del Instituto Mexicano del Petróleo (IMP), de 1978 a 1982, siempre acompañó al IMP en su trayectoria y en todos sus aniversarios, hasta el quincuagésimo tercero. Hoy corresponde a la comunidad del IMP acompañar el legado y el recuerdo del ingeniero Straffon, quien falleció el 23 de abril de 2019.
Durante su paso por el IMP promovió y organizó la ingeniería de proyectos de explotación, tanto en tierra como en mar; asimismo promovió y apoyó la ingeniería de yacimientos en el nivel de laboratorio, para que el IMP hiciera los estudios integrales de rocas productoras que antes se hacían en laboratorios internacionales.
En esos años dio un mayor impulso a la formación y actualización de los ingenieros mexicanos que se requerían para el trabajo estratégico del Instituto, de tal forma que en ese tiempo se consolidó el proyecto de convertir al IMP en el brazo tecnológico de Pemex, un objetivo que sigue siendo guía de nuestra institución.
También para el ingeniero Straffon Arteaga los brazos fueron imprescindibles para su larga y fructífera vida que comenzó el 13 de septiembre de 1921 en Real del Monte, Hidalgo. Todavía en años recientes, en plena actividad intelectual, se le oyó decir:
“Creo que mientras el corazón esté coordinado con el cerebro y los brazos, entonces estaré en condiciones de seguir sirviendo a mi familia, a la comunidad, a mis amigos, a las instituciones y al país. Puede uno andar sin piernas, para eso hay sillas de ruedas, pero sin brazos, qué hace uno, no se puede ni agarrar un periódico o un libro. Los brazos son importantísimos y el corazón más, porque si no se tiene corazón no se tiene nada”.
Ahora el corazón del ingeniero Agustín Straffon Arteaga ha dejado de latir, a los 97 años de edad, pero el brazo tecnológico que contribuyó a forjar sigue sirviendo a la industria petrolera, y su recuerdo persiste porque es un pilar del Instituto Mexicano del Petróleo.
