Con más de 110 mil empleos generados en el sureste y trabajos en sus distintos tramos, que van desde el ensamble de rieles y durmientes, pasos de fauna, drenaje transversal, viaductos y pasos vehiculares, hasta el mejoramiento de zonas arqueológicas, el Tren Maya avanza rumbo a su inauguración en diciembre de 2023.
Un avance importante está en el ensamble de rieles y durmientes en El Triunfo, Balancán, Tabasco, en el tramo 1, Palenque-Escárcega, que se ejecuta mediante escaleras de 24 metros de longitud que, una vez concluidas, se integrarán a la vía férrea del Tren Maya.
En el tramo 2, Escárcega-Calkiní, a la altura de Uayamón, Campeche, sigue la construcción y colocación de pasos de fauna para conservar y proteger el ecosistema. En este tramo también avanzan las obras de drenaje transversal con materiales de alta calidad para prevenir eventuales inundaciones en la vía.
En el tramo 3, Calkiní-Izamal, cerca de Xtepén y Tebec, en Umán, Yucatán, avanza la cimentación de un viaducto de 128 metros que permitirá el paso del tren por la parte superior para no afectar el tránsito de vehículos en la carretera Mérida-Campeche.
Al mismo tiempo, en el tramo 4, que va de Izamal a Cancún, en el entronque Pisté, de Yucatán, siguen adelante los trabajos de un paso inferior vehicular que también será necesario para el paso del tren en armonía con la circulación de vehículos.
Entre las obras complementarias a la vía férrea, de suma importancia en la construcción del Tren Maya, destaca la construcción del nuevo edificio donde se ubicarán oficinas, módulo de policía, sistema de controles y área de servicios, en la plaza de la caseta de cuota Chichen Itzá.
