Ejemplo de esto, son las acciones que la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación (SAGARPA) ha venido realizando desde 1994 donde prácticamente los usos y aplicaciones de la energía renovable inician de manera sistemática dentro del sector agropecuario. SAGARPA a través del Fideicomiso de Riesgo Compartido (Firco), plantearon la oportunidad de utilizar las fuentes renovables con fines productivos dentro de diversas unidades agropecuarias.

Desde entonces, se ha establecido como prioridad en sus acciones el lograr un desarrollo económico y productivo dentro del sector que sea amigable con el medio ambiente, impulsando y promoviendo diversos proyectos que incorporen fuentes de energía renovable.

El objetivo de este proyecto es el de “contribuir a la reducción de emisiones de gases de efecto invernadero, que incidan en la mitigación de los impactos del cambio climático, mediante la adopción de energías renovables y prácticas de eficiencia energética en los procesos productivos de los Agronegocios, para propiciar el ahorro de energía y la disminución de costos de producción, favoreciendo la rentabilidad de las empresas.”

De manera particular, las acciones de energía renovable y eficiencia energética, contemplan las siguientes tecnologías:

  • Sistemas de energía solar térmica.
  • Sistemas de Biodigestión.
  • Sistemas fotovoltaicos.
  • Prácticas de eficiencia energética.
  • Autogeneración de energía eléctrica a partir de biogás.

El proyecto propicia la disminución de la contaminación de los recursos de suelo y agua, en beneficio de la conservación y mejoramiento del entrono ambiental. Además de ser un agente inductor de los ahorros de energía por mediación de la sustitución de equipos y la aplicación de prácticas de mayor eficiencia energética que en combinación con las energías renovables darán oportunidad de sustituir el consumo de los combustibles fósiles.

El biogás es una de las fuentes de energía renovable que actualmente presenta una gran potencialidad de generación de energía, para ser usada en diversas aplicaciones. Este gas es resultado de procesos de biodegradación de material orgánico en condiciones anaeróbicas, es decir, sin oxígeno, debido a la intervención de las bacterias llamadas metano génicas; y está compuesto por una mezcla de gases en donde predomina el metano y el dióxido de carbono.

El metano, que es el último eslabón de este proceso, es un gas inflamable, que es el producto útil de este proceso y que mediante una sencilla adaptación puede ser utilizado en cualquier cocina o calefactor. En el caso del sector agropecuario, el biogás puede ser obtenido de excretas y desechos agrícolas, siendo el estiércol el sustrato más importante dados los volúmenes generados y la facilidad de su manejo.