La Dirección General de Bibliotecas firmará convenios con universidades públicas del país para que los espacios de las bibliotecas públicas se conviertan en laboratorios pedagógicos, ello en el marco de la Estrategia Nacional de Lectura.

Lo que se busca es reactivar la Red Nacional de Bibliotecas Públicas al vincularse con los institutos de educación superior autónomos estatales y generar una estrategia para que sus alumnos, a través del servicio social o sus prácticas educativas, desarrollen talleres de fomento a la lectura en los espacios bibliotecarios como si se tratara de un laboratorio pedagógico.

Para ello se ha diseñado una plataforma Moodle donde se ofrecerá una capacitación a distancia a los estudiantes, la cual estará dividida en 12 sesiones semanales de dos horas cada una y que implicarán otras 12 horas más de desarrollo práctico del estudiante universitario en los espacios de la biblioteca pública para atender a grupos reducidos de alumnos de educación básica. Los estudiantes universitarios terminarán desarrollando 10 talleres y cubriendo sus 480 horas de servicio social, utilizando al espacio de la biblioteca pública como un laboratorio y fomentando la lectura.

Los laboratorios pedagógicos serán fundamentales para evaluar los hábitos de lectura en todo el país y estructurar un repositorio nacional de evidencias a la orden de investigadores y cuerpos académicos de las universidades del país para que a su vez puedan hacer análisis de sus resultados y que también redunden o tengan un impacto en la toma de decisiones de la Dirección General de Bibliotecas.

Con la formalización de los convenios estatales se lograrán tres grandes objetivos: reactivar la Red Nacional de Bibliotecas Públicas por medio del trabajo que se realice en los talleres de estrategias pedagógicas, aplicados por estudiantes universitarios; empoderar a la comunidad universitaria del país y cumplir con la Ley General de Bibliotecas para sentar un precedente en el cómo tomar decisiones políticas con base en un trabajo sistemático de investigación que garantice el éxito de estas. Además, con base en los resultados de estas investigaciones, la DBG podrá armar colecciones de libros específicas para repartir en los municipios del país, acorde a sus necesidades de lectura.

La primera institución pública de educación superior en firmar el acuerdo ha sido la Universidad Autónoma de Nuevo León en el marco de la Feria Universitaria del Libro, UANLeer 2019. Las siguientes universidades serán las de Sinaloa y Querétaro, pero aproximadamente los convenios de 17 universidades más ya fueron validados por sus respectivas áreas jurídicas y ahora se encuentran en la Dirección Jurídica de la Secretaría de Cultura. Con ello se contempla iniciar el programa de capacitación y talleres en agosto.

No obstante, como plan piloto, en breve arrancará el programa en 105 municipios del país con la participación de normalistas y, en su momento con estudiantes de Tecnológicos, con lo cual y aunado a los universitarios, la cobertura de las bibliotecas públicas del país será mucho mayor.

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