La cifra más alta para cualquier mes desde enero de 2009 en que la Comisión Nacional del Sistema de Ahorro para el Retiro (CONSAR) inició el cálculo mensual de las plusvalías, es decir, desde que las comisiones que cobran las Administradoras de Fondos para el Retiro (AFORE) se homologaron a un porcentaje de los saldos administrados.  Con este resultado se acumulan 7 meses consecutivos de plusvalías que en su conjunto ascienden a 309,458 millones de pesos.

En el primer semestre 2019 las plusvalías del SAR fueron de 280,926 millones de pesos, los cuales se han reflejado en atractivos rendimientos en beneficio de los trabajadores. Esta cifra es la más alta que se ha observado para cualquier primer semestre en los últimos 11 años.

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Cabe destacar, que estas plusvalías se obtuvieron a pesar de la volatilidad que caracterizó a los mercados financieros nacionales e internacionales durante el primer semestre, tales como la revisión de las calificaciones de la deuda de PEMEX y la modificación de estable a negativa de la calificación de la deuda soberana del país por parte de algunas agencias calificadoras, la intensificación de la guerra comercial entre Estados Unidos y China, la amenaza de la imposición de aranceles por parte de los Estados Unidos a las importaciones provenientes de México y fenómenos geopolíticos en el ámbito internacional, así como del mal desempeño de los índices accionarios de la Bolsa Mexicana de Valores en mayo y de la declaración de quiebra de Oro Negro en junio.  

Las plusvalías obtenidas a lo largo del primer semestre del año se explican fundamentalmente por la mayor percepción de aversión al riesgo por parte de los inversionistas y por el diferencial entre las tasas de interés en México y las tasas de interés de otros activos en las principales economías avanzadas del mundo.  La incertidumbre ha propiciado que los inversionistas institucionales, incluidas las administradoras de fondos globales, se refugien en activos de bajo riesgo con los mejores rendimientos, entre ellos los de algunas economías emergentes como la mexicana. En particular, las AFORE, en congruencia con su responsabilidad fiduciaria para con los trabajadores, han aprovechado los altos rendimientos que han venido ofreciendo los valores gubernamentales nacionales a distintos plazos.