1. Durante todo el año tuviste que …
  1. Empeñar y/o pedir prestado para solventar tus gastos.
  2. Solventar algunos baches financieros, pero nada de que preocuparse.

 

  1. Para ti, ¿cuál es la mejor forma de ahorrar?
  1. En una tanda o debajo del colchón.
  2. En una cuenta de ahorro con una institución financiera.

 

  1. ¿Qué porcentaje de tus ingresos destinas al ahorro?
  1. Nunca te sobra dinero al final del mes.
  2. Tratas de ahorrar un porcentaje de lo que ganas cada mes.

 

  1. ¿Llevas un control financiero?
  1. No, gastas conforme tienes dinero.
  2. Sí, llevas un registro de todos, no confías tanto en tu memoria.

 

  1. ¿A qué destinas el dinero que ahorras?
  1. No te alcanza para ahorrar.
  2. En gastos inesperados como emergencias o en uno que otro gustito.

 

Verifica tu respuesta, ¿mayoría de qué obtuviste?

 

Mayoría de “A”: ¡Tus finanzas están en peligro!

Lamentamos decirte que tu economía va por la calle de la amargura, pero aún estas a tiempo de salvarla. Crear un presupuesto cada mes, en el que incluyas tus ingresos y gastos, puede ayudarte a saber si te encuentras gastando en cosas innecesarias que bien podría servirte para destinarlo al ahorro.

 

Mayoría de “B”: ¡Vas muy bien!

Es claro que sabes cómo controlar tus impulsos y tomar las mejores decisiones para tu futuro, es por ello que el siguiente paso es hacer crecer tu dinero por medio de la inversión. Existen muchas alternativas sencillas de usar y de bajo riesgo con las que puedes empezar, acércate con la institución financiera de tu preferencia y pregunta por los detalles.