Con el fin de eliminar los estereotipos e impulsar la igualdad de género a través de la práctica deportiva, la Comisión Nacional para Prevenir y Erradicar la Violencia contra las Mujeres organizó el Primer Torneo Relámpago Súper Liga universitaria femenil Fútbol 7: “Por un fútbol sin estereotipos de género”, en alianza con la agencia deportiva Sports Full, ONU Mujeres México, Cinemapark, de Fundación Cinépolis, la Comisión Nacional del Deporte (Conade) y el Instituto Mexicano de la Juventud (IMJUVE).

Este Torneo Relámpago 2018, realizado en el marco de la campaña Nosotros por Ellas de ONU Mujeres, buscó visibilizar y reconocer la participación de las mujeres en el fútbol, en una sociedad que históricamente ha considerado a este deporte nacional como una actividad “poco femenina”, masculina o “para hombres”, relegando al futbol femenil a un segundo plano o trivializando esta práctica al no darle el apoyo económico y la cobertura que merecen, como lo demuestra la marcada desigualdad que hay entre el fútbol profesional varonil y el femenil.

Sin embargo, y a pesar de los obstáculos que ha enfrentado el fútbol femenil alrededor del mundo, hoy sabemos que el deporte es una gran herramienta para reconstruir estereotipos negativos que limitan el ejercicio de los derechos humanos y las oportunidades de las personas.

“El deporte tiene mucho potencial para contribuir de manera social, política y económica al empoderamiento de las mujeres y las niñas. Por eso es importante que el gobierno, la sociedad civil, el sector privado y las Naciones Unidas reconozcan sus beneficios y lo promueven entre mujeres y niñas”, señaló Natalia Calero Sánchez, oficial nacional de Programas de ONU Mujeres México, durante la ceremonia de inauguración del torneo.

Auge histórico del fútbol femenil
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De acuerdo con el informe de la FIFA Forward 2.0, gracias a las reformas de la FIFA —cuya implantación ya está en marcha en la propia FIFA, en las confederaciones y en las federaciones miembro—, así como al incremento de recursos económicos a través del Programa Forward de la FIFA, el balompié femenino cobró bríos en 2017, de tal modo que, entre las federaciones:

• el 81% cuenta con una liga mayor
• el 78% tiene una liga juvenil femenina
• el 80% dispone de una estrategia para fútbol femenino
• el 78% ha invertido parte de los fondos Forward para gastos operativos en actividades del fútbol femenino (en promedio, el 17 % de la financiación)

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Si bien el fútbol femenil ha visto un avance significativo en los últimos años, aún es necesaria la participación activa del gobierno, de la academia, del sector privado, de la sociedad civil y de la ciudadanía, no solo para impulsar políticas públicas que favorezcan y faciliten la práctica deportiva entre niñas y jóvenes, sino para eliminar prejuicios y estereotipos que resten valor al deporte femenil, en cualquier disciplina.

“Es necesario cambiar la forma de pensar y eliminar los estereotipos que hombres y mujeres hemos heredado”, señaló Angela Quiroga, titular de la Conavim, en el marco de este torneo. “Con esta iniciativa se busca que las jóvenes participantes se demuestren a ellas mismas, a sus instituciones y a la sociedad en general que somos iguales y que no debe haber distinción ni privilegios entre hombres y mujeres”, dijo.

Por ello, desde Conavim seguiremos trabajando junto con dependencias y organizaciones aliadas a fin de que este torneo sea el comienzo de una política pública nacional en la materia, y de seguir impulsando el deporte femenil como una herramienta para el empoderamiento de las mujeres y el impulso de la igualdad de género.