A pesar de los cambios mundiales y demográficos, las Naciones Unidas consideran que la familia sigue siendo la unidad básica de la sociedad. En la actualidad, la prolongada pandemia por la COVID-19 ha puesto en evidencia la importancia de las tecnologías digitales, por lo que este año la elebración se centra en el impacto de las nuevas tecnologías en el bienestar de las familias.

A continuación te proporcionamos algunos datos que te permitirán conocer la situación de las familias mexicanas en el contexto de la COVID-19:

  • Según el Censo de Población y Vivienda 2020, la población se distribuyó aproximadamente en 35.2 millones de hogares censales, de estos, 32.6 por ciento son encabezados por mujeres y 67.4 por ciento por hombres. La mayoría de estos hogares (68.2 por ciento) tienen 3 o más integrantes, 19.4 por ciento tiene dos integrantes y 12.4 por ciento son unipersonales.
  • Conforme al Censo 2020, los hogares familiares comprenden  86.7 por ciento de los hogares del país, de estos 70.9 por ciento son hogares nucleares, es decir, aquellos que están formados por parejas con o sin hijos(as) o en los que se encuentra únicamente uno de los padres (monoparentales); 27.9 por ciento son hogares ampliados o integrados por hogares nucleares y monoparentales, pero en donde también residen otros parientes (tíos(as), primos(as), hermanos(as), suegros(as), etcétera); y, por último, 1.1 por ciento son hogares compuestos, es decir, integrados por hogares nucleares o ampliados con personas que no tienen ningún parentesco con el jefe o jefa del hogar.
  • La disponibilidad de tecnologías digitales en las viviendas donde habitan las familias para tomar clases virtuales o realizar teletrabajo ha ido en aumento, según el Censo de Población y Vivienda 2010, solo 21.3 por ciento de las viviendas disponían de acceso a internet, en 2020, esa cifra se ha incrementado a 52.1 por ciento.
  • Las herramientas que contribuyen en lo laboral y educativo a llevar a cabo diversas tareas también han aumentado su disponibilidad en las viviendas, el Censo 2010 indica que cerca del 30 por ciento contaba con acceso a una computadora, laptop o tableta; en 2020 tienen acceso 37.5 por ciento. Sin embargo, la disponibilidad de celular ha tenido el mayor incremento, pasando de 65.1 por ciento en 2010 a 87.5 en 2020, según cifras censales.
  • En contraste con lo anterior, en 2020 en el ámbito rural[1] el acceso a internet de las viviendas solo es de 7.2 por ciento, a una computadora, laptop o tableta es de 6.4 por ciento y 16.5 viviendas tienen acceso a un teléfono celular.

Condiciones de la vivienda y acceso al agua potable

  • El Censo 2020 indica que en 2.4 millones de viviendas convivían más de 2.5 personas por cuarto, condición que puede favorecer la propagación del virus SARS-CoV-2, si no se tienen las medidas adecuadas, debido a las interrelaciones al interior de la vivienda y por la necesidad de algunos(as) de los(as) integrantes de salir a realizar actividades de abasto y apoyo a la economía del hogar.
  • Para cumplir las medidas sanitarias relativas al lavado frecuente de manos, la desinfección adecuada de objetos, superficies, ropa y alimentos para evitar los contagios, es importante considerar que, aunque la mayor parte de las viviendas en el país disponen de agua, según el Censo 2020, aún existen 1.2 millones de viviendas que no tienen acceso a agua entubada, alrededor de 7 millones tiene acceso solo en el patio o terreno  y según la ENH 2017[2], en ese mismo año 8.4 millones de hogares no tenían dotación diaria de agua entubada.

Percepción de Ingresos

  • Los hogares se benefician de diferentes tipos de ingresos, aunque la principal fuente sigue siendo el trabajo, de acuerdo con el cuestionario ampliado del Censo de Población y Vivienda 2020, alrededor del 38.5 por ciento de los hogares pueden acceder a otros ingresos: 64.9 por ciento perciben ingresos de programas de gobierno, 33.9 por ciento por jubilación o pensión, 15.9 por ciento de alguien que vive en otra vivienda, pero dentro del país y 13.1 por ciento de alguien que vive en otro país.
  • La ENCOVID19[3] encontró que uno de los efectos al inicio de las medidas de confinamiento fue que uno de cada tres hogares entrevistados percibió una pérdida de 50 por ciento de sus ingresos.

Repercusiones en la salud mental y convivencia en el hogar

  • De las personas entrevistadas mayores de 18 años en la ENCOVID-19 respecto al distanciamiento social y las presiones económicas, 32.4 por ciento mostraron síntomas severos de ansiedad y 27.3 por ciento presentaron síntomas depresivos, estas son algunas situaciones que podrían crear un contexto desfavorable para quienes integran las familias, como lesiones y agresiones por causa de violencia intrafamiliar y de género, hacia las mujeres, niñez y las personas mayores que conviven al interior del hogar.
  • Conforme a estadísticas del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública, se observa crecimiento de 9.5 por ciento en las carpetas de investigación de presuntos delitos de violencia familiar en el primer trimestre de 2021 con respecto a 2020. Si esta comparación se lleva a cabo con las cifras de 2019, el crecimiento es mayor: 17.9 por ciento[4].

 

[1] Localidades con 1 a 2499 habitantes

[2] Encuesta Nacional de Hogares, 2017

[3] Encuesta de Seguimiento de los Efectos del COVID-19 en el Bienestar de los Hogares Mexicanos.

https://ibero.mx/sites/default/files/comunicado_encovid-19_completo.pdf

[4] Secretariado Ejecutivo del Sistema de Seguridad Pública. Reportes de incidencia delictiva al mes de marzo 2021 (Nueva metodología), actualizados al 20 de abril de 2021. Cifras de Incidencia Delictiva Estatal, 2015-marzo 2021. Disponible en: https://drive.google.com/file/d/10HCHYOD8hvC3lxNyssI6gPyYCD5dXkIj/view