De acuerdo con la CEPAL, la Mesa Directiva de la Conferencia Regional sobre Población y Desarrollo de América Latina y el Caribe (CRPD) y el Fondo de Población de las Naciones Unidas (UNFPA), existe conciencia de que la emergencia sanitaria está afectando de manera desproporcionada los cuatro pilares de la cobertura universal en salud sexual y reproductiva: 1) la disponibilidad de los servicios de salud sexual y reproductiva; 2) los recursos y equipamiento; 3) la demanda y 4) el acceso a los servicios de salud.

El debilitamiento de estos cuatro componentes impacta en la provisión y utilización de los servicios de salud sexual y reproductiva, lo que conlleva a una reducción de su cobertura con un incremento en las muertes maternas y embarazos no intencionales.

Por esta razón, la Secretaria General del Consejo Nacional de Población (CONAPO), Gabriela Rodríguez Ramírez, informó a los asistentes sobre el impacto de la pandemia en la salud sexual y reproductiva de la población mexicana. Indicó que a partir de la implementación de la Estrategia Nacional para la Prevención del Embarazo en Adolescentes (ENAPEA) existe un descenso de la tasa de fecundidad de las mujeres de 15 a 19 años de 7.8 por ciento, sin embargo, la tasa de fecundidad forzada en niñas de 10 a 14 años aumentó 1.7 al 1.8 por ciento.

La titular del Consejo afirmó que la pandemia representa un reto para el país en materia de salud sexual y reproductiva, ya que de acuerdo con estimaciones del CONAPO, en un escenario moderado con un aumento de las Necesidades Insatisfechas de Anticoncepción (NIA) del 20 por ciento, se espera un número adicional de 145,719 embarazos no deseados/planeados entre mujeres de 15 a 49 años de edad y de 21,575 embarazos no deseados/planeados entre adolescentes de 15 a 19 años de edad.

Asimismo, destacó las acciones que implementa el Gobierno de México para garantizar el ejercicio de los derechos sexuales y reproductivos de la población, entre las que destacan el lanzamiento de la Campaña Nacional para la Prevención del Embarazo en Adolescentes ¡Yo Decido! y para la Erradicación del Embarazo en Niñas ¡Yo Exijo Respeto!, que forman parte de la ENAPEA, y la continuidad de la prestación de servicios de salud sexual y reproductiva.

Además, reiteró que en todo el país las mujeres tienen derecho a la interrupción legal del embarazo en casos de violencia sexual y enfatizó que el Artículo 3° Constitucional establece que los planes y programas de estudio deben tener perspectiva de género e incluir educación sexual y reproductiva.

Por su parte, el Secretario Ejecutivo Adjunto de la CEPAL, Mario Cimoli, advirtió que la pandemia por COVID-19 golpea a la región y a los sectores más vulnerables, por lo que es indispensable plantear acciones para hacerle frente. Finalmente, el Director Regional del UNFPA para América Latina y el Caribe, Harold Robinson Davis, mencionó que las experiencias en las buenas prácticas se deben sistematizar y extender a todos los países de la región para asegurar el acceso de todas las personas a los servicios de salud sexual y reproductiva.