La producción de alimentos, generación de empleos, así como el desarrollo regional y económico, son factores que hacen de la pesca una actividad de gran relevancia que tenemos que cuidar, señaló Mario Aguilar Sánchez, Comisionado Nacional de Acuacultura y Pesca, quien añadió que los mexicanos tenemos el gran privilegio de contar con abundancia de productos en nuestras costas, que debemos conservar.

Al concluir los trabajos del Foro Económico de Pesca y Acuacultura 2018, organizado en la ciudad de México por la SAGARPA y CONAPESCA, aseguró que con 11 mil 500 kilómetros de litoral y 6,500 kms. cuadrados de aguas interiores, además de contar con una de las Zonas Económicas Exclusivas más importantes del mundo, México tiene una gran vocación pesquera.

Refirió que a estas actividades de dedican más de 300 mil personas, pero hay muchas más que se benefician de la pesca y la acuacultura, como son los asociados a la industria, quienes surten insumos, avituallan embarcaciones o proveen algún servicio a los pescadores, “es un sector que se traduce en fuerza importante de empleos que propician desarrollo en las regiones pesqueras del país”, reiteró.

Ante investigadores, académicos, representantes del sector industrial y productivo, organizaciones de pescadores, invitados internacionales y estudiantes de instituciones de educación superior, que asistieron a este evento, considerado como el más importante de la pesca y la acuacultura en México, Aguilar Sánchez destacó que merced a las políticas públicas se han obtenido importantes logros en esta administración.

El titular de la CONAPESCA expresó que gracias al esfuerzo de los productores, se alcanzó la cifra histórica de 2.15 millones de toneladas anuales de alimentos, con valor de 40 mil millones de pesos, una tasa de crecimiento de la acuacultura de 13 por ciento, el consumo per cápita aumentó de 8.9 a más de 13 kilogramos, y hoy el 25 por ciento de la producción pesquera nacional está certificada, cuando el promedio mundial es del 12 por ciento.

Sobre el tema de la sustentabilidad, aseguró que desde años atrás ésta ha sido impulsada por pescadores y acuacultores, quienes son los primeros interesados en la conservación y en el buen manejo de las pesquerías a fin de mantener niveles de abundancia, continuidad y permanencia de sus actividades.

Aguilar Sánchez refirió que el instrumento más importante para la sustentabilidad y responsabilidad pesquera es el Código de Conducta para la pesca responsable de la FAO, que se gestó y concibió en México, en la Conferencia de Cancún efectuada en 1992.

Citó ejemplos de acciones emprendidas por autoridades y pescadores, como en el caso de la pesquería del camarón para cuya extracción se utilizan Dispositivos Excluidores de Tortugas, que cada año son revisados y certificados; también Dispositivos Excluidores de Peces.

Además, se cuenta con un sistema de monitoreo satelital de la flota mayor, el cual ha sido calificado por la FAO como eficiente, “así sabemos en tiempo real dónde está cada embarcación mayor, cómo se ha desempeñado, y en caso de que entren a una zona prohibida los detectores emiten señales de alerta a la CONAPESCA y a la Secretaría de Marina, además de que los propios barcos se alertan cuando ingresan en áreas restringidas”, apuntó.

Abundó que en las embarcaciones atuneras y ahora también en algunas camaroneras y sardineras, se cuenta con la presencia de observadores a bordo, que no es personal del gobierno, de empresarios, o armadores, sino especialistas independientes que zarpan con los barcos, revisan y observan las maniobras y procesos de captura y reportan a las autoridades el desempeño de esas embarcaciones.

Finalmente, el titular de la CONAPESCA expuso que hay un debate a nivel mundial sobre cuál es la vocación de los océanos y señaló que hay quien habla de los océanos como un espacio donde debe estabilizarse o detenerse la operación pesquera y otras actividades; sin embargo, hay entidades como la FAO que señala que los océanos son un espacio de oportunidad y desarrollo, siempre y cuando sean éstos manejados de manera sustentable, “y nosotros estamos de acuerdo con esta filosofía de la FAO”, apuntó.

Mario Aguilar subrayó que México, por el tamaño de su población, es un país de grandes necesidades alimentarias que tiene el privilegio de contar con zonas oceánicas muy importantes, y tenemos una gran oportunidad de seguir aprovechando nuestros recursos pesqueros, con responsabilidad, para beneficio de millones de mexicanos.