• Parte de la conducta y hábitos de los osos ha sido captada en vídeo lo cual puede brindar mucha información sobre la especie por tratarse de ejemplares en vida libre

 

La Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (Conanp), a través del Área de Protección de Flora y Fauna Campo Verde, continua con el monitoreo biológico de la subespecie de oso negro americano (Ursus americanus machetes), de la Sierra Madre Occidental, en dicha Área Natural Protegida (ANP), ubicada en el Noroeste del Estado de Chihuahua.

Los resultados del período 2016-2019 indican que la población de oso negro en el APFF Campo Verde es la más abundante para la Sierra Madre Occidental, pues se tiene un estimado poblacional de 106 individuos y una densidad de 0.140 ind/km2, documentándose el éxito reproductivo de la especie, al contar con 37 registros fotográficos de hembras con crías (dos oseznos en promedio).

En 2019 se obtuvieron videos de varios osos mostrando parte de su conducta en vida libre, en donde se observan los baños que toman en ojos de agua o pozas del Área Natural Protegida, marcan territorio rascando y/o restregándose contra los árboles, lamen rocas para suplementar su dieta con minerales, entre otros comportamientos peculiares, que no se habían registrado con anterioridad.

Este monitoreo se suma a los estudios implementados ininterrumpidamente desde el 2012 en el ANP, como parte del Programa de Acción para la Conservación de Especies (PACE) y con la participación de investigadores y pobladores de comunidades locales como La Norteña, El Largo y La Gloria, los cuales se han apropiado del oso como símbolo de identidad regional y participan activamente en las acciones de conservación, integrándose a las actividades de generación de información y manejo de esta especie icónica del APFF Campo Verde.

La principal amenaza de la especie es la pérdida de hábitat debido a la deforestación de los bosques y fragmentación, por actividades productivas no alineadas con un manejo integral del territorio.

Aunado a lo anterior, se encuentran los incendios forestales, atropellamientos y la cacería, por lo que la especie fue considerada En Peligro de extinción (P) en el Anexo Normativo III, lista de especies en riesgo de la Norma Oficial Mexicana (NOM-059-SEMARNAT-2010); con ello se sentaron las bases de su conservación, lo que a su vez, por tratarse de una especie sombrilla, incide favorablemente en la subsistencia de muchas otras especies del Noroeste de México, con las cuales comparte el ecosistema.