Durante el evento convocado por la Reserva de la Biosfera Alto Golfo de California y Delta del Río Colorado y el grupo de promotoras ambientales “Pejerreinas del Golfo de Santa Clara”, la comunidad golfeña disfrutó de una variedad de actividades cuyo fin fue la de inculcar y fomentar una cultura conservacionista. En éstas se pudieron involucrar niños, niñas, ancianos, residentes y visitantes de la comunidad del Golfo de Santa Clara.
Entre pláticas informativas, talleres infantiles sobre aves, cuentacuentos, obras de teatro de especies prioritarias, presentación de bailables folclóricos a cargo del maestro Edson Bernal y otras actividades fue que transcurrió la jornada.
Los stands se ubicaron en la zona del Mirador, se instaló una exposición fotográfica y una mesa informativa con trípticos, posters y cuadernillos con información sobre la Reserva de la Biosfera, esto con la intención de que la comunidad y las y los visitantes conocieran la información de las especies de una forma amena y divertida.
Como parte del evento se realizó una limpieza de playa, donde se recolectaron 18 sacos de basura en un área aproximada de 20 metros, con un peso de 540 kilogramos. Los residuos más comunes fueron las botellas de plástico y el unicel.
Se atendieron alrededor de 330 personas durante los dos días, entre visitantes y residentes de la comunidad, quienes mostraron mucho interés por la información y el evento, ya que han sido pocas las veces que se realiza un festival con información ambiental, lo que es muy atractivo para algunas personas, sobre todo para las y los niños en edad escolar.
Las y los niños participantes se llevaron a casa un paquete escolar y una playera con la imagen de la vaquita marina como premio a su interés y participación. En total fueron 150 paquetes escolares y 150 playeras las que se obsequiaron.
Cabe mencionar que este festival fue financiado a través de recursos del Programa para la Protección y Restauración de Ecosistemas y Especies Prioritarias (PROREST), el cual, además, incluyó pláticas en las escuelas (700 niñas, niños y adolescentes), así como recorridos constantes por la playa para recolectar redes en desuso y evitar el daño a la fauna de playa.
Así concluyó el evento con una excelente participación de la comunidad en las actividades y con gran aceptación por parte de las y los residentes, deseando que pronto se realice una actividad similar.
#ConservarParaVivir