¿Cuántos tipos de pasaporte conoces? El más común de todos es aquel que todos utilizamos cuando salimos del país y que tiene validez universal. Están también los “pasaportes anuales o pase” que algunos centros de diversiones tienen y que te permiten por un pago único entrar cuantas veces quieras a sus instalaciones.

Pero, ¿habías escuchado alguna vez que existiera un pasaporte de la conservación? Seguramente no pero este documento existe en México a partir del año 2006, mismo que te permite ingresar cuantas veces quieras a las áreas naturales protegidas competencia de la Federación, administradas por la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas, durante un año a partir del mes en que se adquiere.

Cuando vemos en carteles, folletos, fotografías o programas televisivos, y escenas de enormes zonas selváticas, arrecifes coralinos de abigarrada belleza, desiertos que parecen infinitos y especies de flora y fauna que verdaderamente nos asombran, pocas veces sabemos que toda esa riqueza natural se encuentra en México, uno de los cinco países en el mundo con mayor diversidad de formas de vida animal y vegetal.

La posición geográfica de México, donde confluyen las regiones neártica y neotropical, crea una mezcla de climas que favorecen para que se den las condiciones propicias para que se desarrollen por igual selvas características del trópico húmedo, como humedales, los desiertos más sureños de América, cumbres alpinas imponentes, barrancas espectaculares, islas que van desde lo árido hasta las tropicales, mares de diversidad inimaginable y cascadas que son muestra de la gran riqueza natural de esta tierra. 

Estos ecosistemas son hábitat de miles de especies de flora y fauna que hacen que México sea llamado “megadiverso”; algunas de esas regiones no han sido impactadas fuertemente por el hombre y debido a su riqueza natural han sido decretadas como áreas naturales protegidas.

Pero estas regiones protegidas no son parques cerrados, áreas cercadas ni nada parecido, por el contrario, son zonas que, por su valor biológico como ecosistemas y por su biodiversidad son protegidas delimitando un polígono imaginario de conservación.

Existen áreas con un gran potencial para la práctica del llamado ecoturismo o turismo de naturaleza, que regulado adecuadamente representa una actividad económica de interés para las comunidades y para el impulso de programas de conservación, por lo que actualmente se aplica en ellas el programa de pago de derechos por el uso, goce y aprovechamiento de estas regiones con alta vocación turística.

Contra lo que pareciera, administrar estás áreas no resulta una tarea sencilla y, mucho menos, barata; se requieren grandes cantidades de recursos económicos y el presupuesto fiscal del que se dispone es cada vez más limitado. De allí que este mecanismo representa una importante vía para recabar recursos alternos para la preservación y conservación de nuestras bellezas naturales, que son invertidos íntegramente en las mismas áreas que captan el recurso.

Pasaporte de la Conservación, incentivando el turismo responsable 

Con la finalidad de fomentar un turismo responsable, tanto de mexicanos como de extranjeros, la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (CONANP) ha emitido el llamado “Pasaporte de la Conservación”, por medio del cual cualquier turista podrá visitar cualquier área natural protegida federal cuantas veces quiera a lo largo de todo el año por un pago único de 333.10 pesos, en cumplimiento a lo establecido en loa artículos198 y 198-A en sus fracciones III y 238-C fracción II de la ley Federal de Derechos.

La adquisición de este documento no es obligatoria, pero facilita la entrada de los turistas interesados en la naturaleza y en la biodiversidad de todo el país. El turista puede optar por comprar este documento o seguir pagando la cuota diaria cada vez que ingrese a un Área Natural Protegida.

El turista que adquiere el pasaporte, debe firmar la credencial antes de usarla por primera vez y se compromete a portarla en forma visible durante su estancia en el ANP, y a portar también identificación oficial vigente con fotografía. Los visitantes pueden comprar el pasaporte para la Conservación en las oficinas de las Áreas Naturales Protegidas que visita.

Con este nuevo pasaporte, se dan pasos firmes para mantener el hogar de ballenas, mariposas, flamencos, jaguares, lobos, tortugas, así como el de cáctus milenarios, helechos, orquídeas y tantas otras especies que habitan en México.

Así mismo, las Áreas Naturales Protegidas no son sólo la casa de estas especies (muchas de ellas en peligro de extinción), sino también regiones en las que se encuentra gran riqueza humana por las comunidades que habitan en ellas. Ellas se ven también beneficiadas con los recursos captados por este pasaporte, porque con ellos se impulsan acciones productivas que les ofrecen alternativas que no degradan al medio ambiente.