40 por ciento de nuestro tiempo de trabajo lo dedicamos a vender, por tanto, todos somos oradores. Dan Pink, en su libro “Vender es Humano”.

Para cualquier persona la comunicación es fundamental, con ella transmitimos ideas, sentimientos y necesidades, además de que es un elemento social que acompaña al ser humano. Sin embargo, existen factores que inhiben la correcta expresión de nuestras ideas, como son: la timidez, la falta de conocimiento y tener una estrategia propia para jerarquizar nuestras ideas.

Considerando estas y otras características, CONAMPROS ofreció un curso de oratoria con el objetivo de superar el miedo a hablar en público, a aprender a hablar con otros de igual o mayor jerarquía en el trabajo, y se dieron herramientas para lograrlo, pues el tema se enfocó a las emociones que sentimos y que rigen nuestra conducta, y la forma en que esto afecta la expresión de nuestras ideas.

Josué Díaz, el instructor del curso, destacó que es importante, para aprender a expresar nuestras ideas e identificar las oportunidades de acción, para poder comunicarnos asertivamente. Esto será más fácil si no confundimos las señales del lenguaje no verbal, o las palabras que se nos dicen sin doble intención.

*Consulta el artículo completo en la Revista Mundo del Trabajo No. 148