Recientemente se llevó a cabo un curso sobre inteligencia emocional en el Comité Nacional Mixto de Protección al Salario, donde se puso de manifiesto que la principal diferencia que tenemos los seres humanos sobre las computadoras y los robots, son nuestras emociones; y lo que nos hace diferentes de los animales es nuestra capacidad de manejarlas de forma inteligente.

La inteligencia emocional tiene que ver con las emociones y con la forma en que las usamos, es necesario aprender a identificar la emoción para poder asociarla a lo que sirve y sacar el mayor provecho al canalizarla hacia lograr nuestros objetivos en la vida.

Las emociones sin duda pueden “levantar muros” o “tender puentes” de entendimiento entre los trabajadores de una organización, y con ello ser o no más productivos.

*Consulta el artículo completo en la Revista Mundo del Trabajo No. 147