La magnitud y la naturaleza de este daño varían en los países de ingresos bajos, medios y altos; sin embargo, los factores asociados con su ocurrencia son los mismos: la fatiga del personal, las condiciones ambientales deficientes o la escasez de personal.
El tercer Reto Mundial de la Seguridad del Paciente de la OMS: Medication Without Harm (Medicación sin daño) se lanzó en marzo de 2017 durante la segunda Cumbre Ministerial Mundial sobre la Seguridad del Paciente en Bonn, Alemania. El lanzamiento del Reto creó una oportunidad para que las partes interesadas impulsen el cambio y trabajen juntas en el fortalecimiento de los sistemas para reducir los errores de medicación y los daños evitables relacionados con la medicación. Medication Without Harm tiene como objetivo reducir el daño grave y evitable relacionado con la medicación en 50%, a nivel mundial en los próximos 5 años. Además, el Reto apunta a establecer la seguridad de los medicamentos en la agenda en todos los niveles de la atención médica y también a realizar mejoras específicas en cada etapa del proceso de uso de medicamentos.
En este sentido, la CONAMED, como Centro Colaborador en materia de Calidad de la Atención Médica y Seguridad del Paciente, participó en una consulta de expertos sobre la implementación del Reto a nivel país, en la sede de la OMS en la Ciudad de Ginebra, Suiza, los días 22 y 23 de noviembre del presente año.
Esta consulta de expertos pretende deliberar sobre las estrategias y acciones necesarias para implementar el desafío a nivel de país. Durante la reunión, el grupo de expertos discutió el desarrollo de la orientación técnica para respaldar y facilitar la implementación en el país, la revisión del borrador del documento de orientación del país, deliberar sobre diferentes perspectivas, compartir opiniones y experiencias, y acordar pasos adicionales.
El resultado de esta consulta es un documento en el que se establecen los pasos y sirve de apoyo a los países en la aplicación del tercer reto global: Medicación sin Daño. El documento ofrecerá una serie de recomendaciones y acciones a realizar en los diferentes niveles del sistema de salud. Las recomendaciones y acciones deberán adaptarse al contexto regional, nacional y local para su aplicación óptima. El objetivo general de dicho documento de orientación es apoyar a los ministros de salud, ministerios y los sistemas de salud para alcanzar los objetivos del Reto Mundial por la Seguridad del Paciente, dentro del marco general de la cobertura de salud universal que tiene en su centro el imperativo: “primero no hacer daño".
