Del 14 al 18 de junio, se celebró de manera virtual el  42° periodo de sesiones de la Conferencia de la FAO durante el cual se presentó el informe del 25° período de sesiones del Comité Forestal (COFO), celebrado del 5 al 9 de octubre de 2020, en conjunción con la Séptima Semana Forestal Mundial, donde participaron 112 países, 19 organizaciones intergubernamentales y sociedad civil.

El informe del 25° período de sesiones del COFO fue presentado el 16 de junio por Víctor Eduardo Sosa Cedillo, Vicepresidente del COFO, en representación del Presidente del COFO, León Jorge Castaños Martínez, Director General de la CONAFOR. Durante su intervención en la sesión se comentó que actualmente se atraviesa un momento de crisis climática, sanitaria y económica sin precedentes, y que los bosques ofrecen soluciones clave socioeconómicas y ambientales.

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Sin embargo, se requieren acciones urgentes para revertir la deforestación y la degradación de los bosques, ya que de acuerdo con el Informe de la Evaluación de los recursos forestales mundiales 2020, el mundo pierde 10 millones de hectáreas de bosques cada año.

Refirió que durante el Comité, el lanzamiento de la publicación “El estado de los bosques del mundo 2020: Los bosques, la biodiversidad y las personas” (SOFO), preparado conjuntamente por la FAO y el PNUMA, fue acogido con beneplácito. Asimismo,  fue recomendado que se consideraran los hallazgos clave de éste en las negociaciones del marco de biodiversidad posterior a 2020.

Tras señalar la importancia de la diversidad biológica forestal para los servicios de los ecosistemas y la seguridad alimentaria, se compartió que COFO solicitó a la FAO fortalecer las consideraciones forestales en el trabajo de integración de la diversidad biológica en el sector agrícola. De igual forma, expresó que COFO reconoció el papel de los bosques en la restauración de ecosistemas, particularmente los ecosistemas productivos, por lo que en el marco del Decenio de las Naciones Unidas sobre la Restauración de los Ecosistemas (2021-2030), el Comité también solicitó a la FAO intensificar los esfuerzos de restauración de bosques y paisajes, a todos los niveles.

El Comité reconoció el papel de los bosques y la gestión forestal sostenible tanto en la creación de resiliencia como en la mitigación y adaptación al cambio climático y  sus efectos. Y alentó a los países Miembros de la FAO, a poner énfasis en acelerar la implementación de las estrategias y planes de acción nacionales para la reducción de emisiones por deforestación  y degradación forestal (REDD+).

En este sentido, el Comité, junto con los miembros de la Asociación de Colaboración en materia de bosques, pidió a la FAO,  basarse en los resultados de una iniciativa conjunta sobre “Trabajar en todos los sectores para detener la deforestación y aumentar el área de bosque: De la aspiración a la acción”.

Se informó que el COFO invitó a los países Miembros a promover la coordinación de políticas y alinear los incentivos públicos para detener la deforestación, de acuerdo con la legislación nacional, y fomentar sistemas alimentarios sostenibles. Con el fin de fortalecer las contribuciones del sector forestal a la mejora de los sistemas alimentarios e intensificar las acciones para detener la deforestación, el COFO solicitó a la FAO que integrara la actividad forestal en sus labores sobre sistemas alimentarios y recomendó una cooperación más estrecha entre el COFO y el Comité de Agricultura (COAG).

También, se señaló que el COFO alentó a los países Miembros a integrar sus prioridades en el sector forestal, en los planes de recuperación posteriores a la COVID-19 y en el Marco de Cooperación de las Naciones Unidas para el Desarrollo Sostenible;  recomendó que se continúe dando prioridad a la implementación del Plan Estratégico de las Naciones Unidas para los Bosques 2017–2030 y los Objetivos de Desarrollo Sostenible.

Para concluir su intervención, se reiteró que las inversiones en la restauración forestal también contribuyen a la recuperación económica posterior a la pandemia de la COVID-19. Las actividades y acciones de manejo forestal crean empleos verdes, generan ingresos, mejoran la salud humana y aumentan la seguridad alimentaria.

Finalmente, la Conferencia de la FAO aprobó el Informe del 25° período de sesiones del COFO y las recomendaciones que contiene.