La naturaleza ofrece servicios indispensables para el ser humano como oxígeno, agua, alimento, madera, suministros para medicina, entre otros. Estos servicios los brinda gratis.

Pero cuidar de los ecosistemas forestales es tarea de quienes recibimos estos beneficios.

Esto requiere de tiempo, dinero y mucho esfuerzo, principlamente por parte de gente que habita esos terrenos.

/cms/uploads/image/file/454689/PAISAJE_PICO_DE_ORIZABA.JPG

¿Cuánto cuesta el capital natural?, ¿debería pagarse?, ¿quién paga?, ¿quién recibe el pago?, ¿cómo se mide el valor de un área natural?

Estas y otras interrogantes fueron el tema central de la conferencia magistral de Pablo Martínez de Anguita denominada "Los servicios de los ecosistemas y el capital natural: Del enfoque de las compensaciones al de los sistemas de contabilidad  y monitoreo".

"Pagar a quienes cuidan de los ecosistemas los dignifica por su valiosa su actividad", afirmó en su conferencia el Dr. Anguita, en el marco de la Expo Forestal 2018.

Para que la gente conserve el patrimonio natural no debe haber asistencialismo, ni ayuda, sino un pago, es decir, se les debe comprar un servicio ambiental, aseguró.

/cms/uploads/image/file/454687/IMG_0063ok.jpg

El especialista ejemplificó con el caso de una cuenca hidrológica, donde por el cuidado de las personas que habitan el lugar, una ciudad cercana obtiene agua limpia, peces, actividad económica, recreación, entre otros. 

Lo justo, dijo, es que la ciudadanía o las empresas le paguen a los dueños de la cuenca para que la sigan manteniendo en buen estado.

Para que esto suceda los dueños de los bosques deben verlo como un negocio, pero para saber cómo vender, necesitan primero saber qué tienen para ofrecer y eso lo obtienen el monitoreo de sus recursos.

/cms/uploads/image/file/454690/REFO.jpg

Entre los servicios que se deben pagar están el almacenamiento de carbono, la regulación del clima, tierra fértil, conocimientos, identidad cultural, recreo, agua potable, polinización, entre muchos otros.

Para Anguita, México es un ejemplo en este sentido, pues tiene el esquema llamado Pago por Servicios Ambientales, el cual nació hace 15 años y es manejado por la Comisión Nacional Forestal (CONAFOR).

El programa apoya a los dueños o poseedores de los terrenos forestales que tienen ecosistemas ubicados en áreas identificadas con altos valores ambientales.

/cms/uploads/image/file/454688/libelula.jpg