La brigada forestal de Sierra de Juárez en Baja California tiene la misión de proteger los dos parques nacionales con los cuenta la entidad, Constitución de 1857, enclavado en la región central de la Sierra de Juárez y el parque Sierra San Pedro Mártir, ubicado al sur.

Conformada por 10 combatientes de la Comisión Nacional Forestal (CONAFOR), la brigada se encarga de que estas áreas naturales protegidas preserven sus paisajes, en los que habitan el cóndor californiano, el águila real y mamíferos como el borrego cimarrón, al llevar a cabo acciones de combate y prevención de incendios forestales.

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Dentro del parque Constitución de 1857, en el ejido Sierra de Juárez se encuentra la base del campamento, donde planean y organizan sus actividades.

Las labores de la brigada comienzan todos los días a las 8 de la mañana, cuando los combatientes ya se encuentran fuera del campamento, listos para abordar la camioneta todo terreno que los trasladará a la carretera federal.

Uno de sus mayores retos es neutralizar un acto que es tan común como dañino por parte de los automovilistas que recorren la carretera federal Ensenada-San Felipe, tirar una colilla de cigarro que puede provocar un incendio forestal.

El pasto ligero crece cada año a orillas de esta carretera y durante el verano se convierte en material combustible para el fuego, que podría extenderse sin control hacia los parques nacionales o las zonas arboladas, sobre todo si hay condiciones de calor extremo, baja humedad y viento.

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Para reducir los riesgos de incendios forestales que inician en la carretera, los combatientes comandados por su jefe de brigada, Guadalupe Salgado, realizarán esta temporada  5 kilómetros de líneas negras, con las que buscan reducir el número de incendios y la superficie que afectan.

"No han ocurrido incendios forestales de gran magnitud en los últimos 10 años, debido a los trabajos de prevención que hacemos antes de que llegue la temporada crítica", explicó Guadalupe Salgado.

Para tener éxito en la apertura de las brechas y la realización de líneas negras, los combatientes toman en cuenta las condiciones climáticas, ya que la humedad debe estar por arriba del 30 por ciento, temperaturas por debajo de los 30 grados  y poco viento para evitar que el fuego se salga de control.

Guadalupe Salgado señaló que es importante hacer estas actividades antes de que comience la temporada de calor, ya que llegan a alcanzar los 35 grados de temperatura y en esas condiciones es imposible realizar las líneas negras.

Otra de las actividades que realizan son las quemas controladas en áreas que tienen cobertura de arbolado adulto.

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Este trabajo consiste en retirar el material combustible que se encuentra debajo y a un lado de los árboles adultos para posteriormente quemarlo, con lo que se reduce significativamente la posibilidad de que un incendio forestal avance y los afecte.

Por su parte, las brechas cortafuegos las realizan todo el año y son espacios lineales de al menos cinco metros de ancho, donde se debe retirar la vegetación hasta llegar a suelo mineral, esto con el objetivo de que al presentarse un incendio, se detenga en la brecha ante la falta de combustible.

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En temporada de asueto, los combatientes llevan a cabo labores de prevención entre los visitantes de los parques, al repartir información útil que los invita a no tirar basura y apagar correctamente fogatas.

"Somos de aquí y es nuestro hogar, por eso siempre trabajaremos para evitar y combatir los incendios forestales de estos bosques ", concluyó Guadalupe Salgado.