Ciudad de México, a 27 de enero de 2018 CONADE El tema de las lesiones en deportistas de alto rendimiento, es muy importante ya que recibe una atención prioritaria por parte de entrenadores, personal médico y psicólogos vinculados con el deporte, debido a las repercusiones negativas que aparecen en los atletas ante estos riesgos.

Difícilmente se encuentra un atleta que no haya sufrido alguna lesión a lo largo de su carrera deportiva, consideradas como un “riesgo profesional”, ya que se hacen cada vez más frecuentes, debido a la alta exigencia del entrenamiento, ya sea como interacción en el entorno de competencia o con otras personas (equipos contrarios).

Además, ciertos aspectos de las lesiones ponen en riesgo el carácter individual del deportista, su salud mental y cuestiones personales.

La Dra. Diana Vázquez Cruz coordinadora de psicología del deporte del Centro Nacional de Desarrollo de Talentos Deportivos y Alto Rendimiento (CNAR), explicó que existen diversas causas, por las cuales puede haber un riesgo de lesión, por ejemplo, depresión, ansiedad y estrés; y si no hay un buen manejo de estas variantes psicológicas, el deportista puede llegar a una saturación que, en algún punto, si no es tratado puede desencadenar alguna lesión deportiva.

La Doctora detalló que los principales sentimientos o reacciones ante una lesión, son: Enojo, irritabilidad, tristeza que podría desencadenar a una depresión; y en general "emociones negativas".

“Hay sentimiento de todo tipo, lo primero es enojo, es una reacción de ¿Cómo me pudo ocurrir esto a mí?, esto va a afectar mi salud, mi competencia” añadió Diana.

Todos los deportistas están predispuestos a una lesión y en realidad las causas principales podrían ser que están mal entrenados, que no están preparados físicamente o algún golpe o suceso durante una competencia, sin embargo, en la parte psicológica, lo que están más predispuestos serian aquellos que no tienen una mentalidad fuerte ya que puede causar una distracción y desencadenar un siniestro.

La coordinadora indicó que es importante trabajar una mentalidad fuerte con base en:

  • Concentración
  • Qué quiero y cómo lo voy a lograr
  • Establecimiento de metas
  • Manejo de emociones, manejo de la frustración y estrés.

Si se tiene un buen manejo de estas variantes, difícilmente bajara de nivel, sin embargo cuando no  lo hay, podría haber un riesgo.

Como tal, no existen etapas del problema, sino que dependiendo del tipo de lesión es cómo se genera un estadio, pero en general son emociones negativas saturadas.

“Es importante realizar, el trabajo psicológico con el deportista para que aprenda a manejar sus emociones, y que sepa que, si trabaja adecuadamente una rehabilitación no solo física, si no psicológica, puede volver a un estado activo, e ideal para su deporte”, comentó la Doctora Vázquez.

Posteriormente  se necesita trabajar una rehabilitación psicológica donde  se incluye

  • Técnicas de relajación
  • Manejo del dolor
  • Establecimiento de objetivo para la rehabilitación: Donde el atleta determina el tiempo de rehabilitación y que va a ir trabajando cada mes.

“Se necesita concentración, no solo del cuerpo, si no la mente, las emociones, los pensamientos , que él atleta vaya teniendo la seguridad de que todo el trabajo valdrá la pena y que en esos 2 meses o 6 meses que el deportista regrese al tatami va regresar fuerte “ añadió Vázquez.

Combinación necesaria

Es importante que el deportista lleve a cabo una rehabilitación física y psicológica a la par, el atleta necesita seguridad para regresar a sus actividades del día a día, ya que en ocasiones viven con el miedo de una nueva lesión, de no querer hacerlo al 100% y con la intervención adecuada, el atleta tendrá buenos resultados y será fuerte en ambos aspectos.

La Psicóloga detalló que cuando un deportista está lesionado es apartado del grupo, entonces todo el mundo sigue su vida y él es el único que está en cama, el único que tiene dolor, que no puedo hacer lo que le gusta, entonces, hay muchas emociones negativas, y lo principal a trabajar es la aceptación y que el atleta no se victímese, si no mentalizar al deportista en cómo puede salir adelante y que no haya un riesgo de caer en una depresión por una lesión.

“Un trabajo psicológico se hace a la par de la preparación del atleta  en su macro ciclo, en la etapa general, específica y de competencia, cuando tenemos un deportista psicológicamente fuerte, que ya se conoce o que tiene habilidades psicológicas, es mucho más fácil la rehabilitación, porque ya entendió que es lo que está pasando y en lo único que se va a enfocar es en fortalecerlas,  este además de ser un paso a la rehabilitación, es un paso para llegar a la competencia y sentirse en confianza” puntualizó Diana.

En caso de que un deportista no lleve a cabo un tratamiento psicológico, se genera un problema social, con la familia, los amigos, con los entrenadores y al final del día cuando regresan hay desconfianza, hay un alto nivel de estrés y se vuelve un círculo de pensamientos negativos. Por lo tanto generan una situación de riesgo en los entrenamientos.

Es esencial que el psicólogo sea parte del equipo multidisciplinario, no solo en una lesión, si no desde el inicio, si al atleta le ocurre un accidente, porque es parte del deporte, con ayuda de este, se va a rehabilitar rápidamente y será más fácil la reincorporación a sus actividades.

“Hay muchas herramientas y muchas habilidades que podemos trabajar con los atletas, nosotros trabajamos diferentes áreas, ser fuertes emocionalmente y esto nos va dar una fortaleza y una confianza para pelear o hacer frente en nuestra competencia y poder obtener los resultados que queremos. En realidad, ese el objetivo de la psicología del deporte, ayudar al atleta a que logre su máximo rendimiento” concluyó la Dra. Diana.

Dentro del Centro Nacional de Desarrollo de Talentos Deportivos y Alto Rendimiento (CNAR) se lleva a cabo una terapia psicológica en algunos deportes desde el inicio de la temporada, así como los atletas se preparan físicamente y técnicamente, también lo hacen mentalmente.