Muchas gracias Eduardo, muchas gracias por la oportunidad de comentar con los ciudadanos, con los pacientes, una política pública en México que tiene hoy grandes resultados para los pacientes.

Hay que decir que una población sana, sin duda, hace países más fuertes y los medicamentos son un elemento esencial para conseguir este objetivo. Tienen los medicamentos una relación directa con el desarrollo de las sociedades.

Los medicamentos en el mundo tienen una historia que puede incluso parecer reciente en la historia de la humanidad, hay que recordar, por ejemplo, cuando en 1796, se crea la primera vacuna contra la viruela, a partir de ahí hemos venido desarrollando con base científica, medicamentos que han arreglado y han proporcionado soluciones importantes para la salud de nuestro país.

Desde la época de 1920, donde se otorga el primer registro sanitario de un medicamento en nuestro país, la industria farmacéutica y la regulación sanitaria, han ido de la mano con el propósito de dar soluciones a la salud de la población.

Apenas en el 2001, se crea la COFEPRIS, como una estancia del Estado mexicano con el propósito de regular con calidad, con seguridad y eficacia los medicamentos, y partir de este momento, a partir de la creación de la COFEPRIS, hemos venido trabajando en esta institución con el propósito de fortalecer el mercado farmacéutico, con esto, dar soluciones a la gente con medicinas de buena calidad.

Quiero decir, además, que México es el país que se encuentra en la posición número 11 del mercado farmacéutico mundial, y esto ha tenido una evolución de la regulación sanitaria que hay que tomar en consideración, porque las enfermedades que vivimos hace 30 años, no son las enfermedades que hoy vivimos.

Quiero comentar a todos ustedes, que pasamos por una transición epidemiológica, en donde las enfermedades infecciosas antes, desde 1970, a mediados de esta década, representaban el 30 por ciento, perdón, el 70 por ciento, y hoy en día estas enfermedades realmente representan el 30 por ciento.

Hoy las enfermedades que más aquejan a la población, son las enfermedades crónico no transmisibles, de tal manera que, en nuestro país hemos vivido una evolución de la regulación sanitaria que pasa por un momento crítico.

En el 2005, se genera la primera gran reforma en materia de salud de gran calado. Qué se pidió en 2005 a los laboratorios, que se preparan para que, en cinco años, a partir del 2010, presentaran al Gobierno mexicano, pruebas que aseguraran calidad, seguridad y eficacia de los productos.

Antes de esta fecha, los medicamentos, los registros de medicamentos, tenían una vigencia indefinida, a partir de 2010, tiene una vigencia de cinco años y están supervisados de manera permanente por la COFEPRIS.

Para que un medicamento en México pueda tener la posibilidad de comercializarse en nuestro país, necesita cumplir con pruebas que aseguren la calidad, la eficacia y sin duda en materia de genéricos, que tengan la misma potencia.

De tal manera que, en términos de esta evolución de la regulación farmacéutica, el Gobierno de la República, en esta administración, el Presidente Enrique Peña Nieto, indicó específicamente a la COFEPRIS, que pudiéramos generar mucho más acceso a la población de medicamentos genéricos con la misma calidad, seguridad y eficacia.

La política farmacéutica del Gobierno de la República, está alineada con tres prioridades en salud; tenemos el objetivo, el mandato de generar acceso efectivo a la población a mejores productos, con la misma calidad, seguridad y eficacia, pero además, al mejor precio.

Por tanto, es importante en el marco de esta política farmacéutica, lo que hemos venido haciendo en materia de medicamentos genéricos.

Voy a explicar un poco de qué se tratan los medicamentos genéricos.

Una patente farmacéutica de un medicamento innovador tiene una vigencia de 20 años, y en cuanto vence esa patente, es posible que cualquier laboratorio pueda solicitar a la COFEPRIS que se autorice un medicamento genérico con una característica.

Primero, que asegure con pruebas científicas, en laboratorio, que va a tener la misma potencia, que va a tener la misma calidad, seguridad y eficacia.

Que pasa por pruebas de bioequivalencia, que pasa por pruebas que aseguren que la calidad, en la producción, es la misma que utilizó y que se siguió en un medicamento innovador.

De tal manera que cuando visualizamos un producto innovador, que tiene una patente, que además es intensivo en inversión, intensivo en conocimiento y vence la patente, en ese momento, el Gobierno de la República, la COFEPRIS, puede autorizar un nuevo medicamento genérico que entra a competir con ese producto innovador.

Entonces, podemos ver dos momentos en la historia del mercado farmacéutico; cuando existe una sola opción para un tratamiento específico, como en el caso del Oseltamivir y el Tamiflu, y después cuando se promueven la entrada de los genéricos existe no solamente esta opción si no seguramente otras más. Y esto, como lo decía Eduardo, genera competencia en el mercado, genera opciones que compiten no por calidad, sino compite por precios.

Y esto de manera inmediata puede ayudar a que los pacientes puedan acceder de manera mucho más efectiva, mucho más rápida a muchas opciones en el mercado con la misma calidad, seguridad y eficacia. De tal manera que esta estrategia se sustenta; uno, en el derecho a la propiedad industrial que se cumple de manera estricta en México, 20 años de patente y además también en el objetivo de tener más genéricos con la misma calidad a menores precios.

Pero sobre todo cumpliendo tres criterios; el primer criterio, que los genéricos se refieran a las enfermedades más relevantes de la población mexicana. Segundo, que sean sustancias que implican un mayor costo para el sector público, para el sector privado. Y que además por supuesto las patentes hubieran ya vencido.

¿Cómo hicimos esta estrategia? Se generó un mecanismo de apoyo a los laboratorios para que cumplieran con los requisitos normativos y se acelerara la introducción de medicamentos genéricos. Y pongo otra vez el ejemplo del Oseltamivir; la patente de este producto venció en febrero del año pasado, para mayo del año pasado ya habíamos introducido a México tres medicamentos genéricos que se producen además en nuestro país y cuya presentación en México implicó que se redujeran los precios en octubre, en las compras del Instituto Mexicano del Seguro Social, en 51 por ciento menos.

De tal manera que esto ha implicado, sin duda, beneficios al sector público, benéficos al sector privado, y en total esta estrategia ya tiene excelentes resultados.

Quiero reportar a todos ustedes que esta estrategia, ya se ha mencionado anteriormente, se han emitido 590 registros sanitarios de medicamentos genéricos, relacionados con 43 sustancias activas en 16 paquetes de medicamentos, vinculados con 20 clases terapéuticas que además han tenido los siguientes dos beneficios específicos.

Primero, están relacionado con 71 por ciento de las causas de mortalidad y enfermedades que aquejan a los mexicanos, con una reducción de hasta el 70 por ciento de precios.

En la siguiente lámina podemos ver por ejemplo, como en las enfermedades cardiovasculares el precio se ha reducido 64 por ciento.

En endocrinología 55 por ciento menor, oncología 39 por ciento, 60 por ciento en enfermedades pulmonares, 63 por ciento en enfermedades neurológicas, 47 por ciento en infecciosas y 51 por ciento en otras enfermedades.

Y quiero poner a ustedes algunos ejemplos puntuales para que puedan identificar estos beneficios; un problema de salud que hoy representa una alerta, un reto sin duda para nuestra población, es el problema de la diabetes.

Quiero mencionar a ustedes que el 9.4 por ciento de la población mexicana padece diabetes, esto es 1 millón 200 mil personas en el país tienen esta enfermedad.

Y para atender esta enfermedad, las secuelas graves de esta enfermedad son atendidas a través de una sustancia, la Pioglitazona. Y la Plioglitazona ayuda precisamente a poder atender el padecimiento disminuyendo sus complicaciones.

En este caso, pongo el ejemplo del genérico de la Pioglitazona, en donde podemos observar que el precio del innovador se encuentra hoy en farmacias en mil 58 pesos, y el precio del genérico es de 290 pesos, esto implica una reducción el 72 por ciento menos en el precio del genérico.

También les pongo el caso de un problema sin duda relevante para las mujeres, incluso también para los hombres de este país, el cáncer de mama. El cáncer de mama es atendido a través de una sustancia que se llama Anastrosol, este de hecho detiene el crecimiento de varios tipos de células de cáncer de mama, y el medicamento innovador tiene un precio hoy de casi 3 mil 300 pesos, cuando el medicamento genérico se encuentra en mil 49 pesos.

Esto es además relevante, porque la Secretaría de Salud reporta 6 mil muertes por cáncer de mama al año, un total de 23 mil casos nuevos, esto es, 60 nuevos casos al día. Esto es 60 casos al día que hoy tienen la opción de acudir a una farmacia y comprar el medicamento genérico con la misma calidad, seguridad y eficacia.

Quiero ponerles otro caso; el caso de la hipertensión. En el 2013 el Gobierno de la República emitió una alerta especifica relacionada con la diabetes, hipertensión y obesidad.

Y en materia de hipertensión, 1 de cada 4 adultos en México padece esta enfermedad, de hecho 25.5 por ciento de la población en México padece esta enfermedad, y en este caso, podemos observar cómo el medicamento precisamente indicado para esta enfermedad, el Valsartán tiene un precio en el innovador de 969 pesos, cuando el medicamento genérico se encuentra en 210 pesos.

Y les pongo el último ejemplo relacionado precisamente con el Oseltamivir. Ustedes recordaran que enfrentábamos un problema de desabasto precisamente, el único productor, el único oferente del Oseltamivir, era un laboratorio extranjero y teníamos que importar el medicamento de un país europeo, y esto significaba sin duda mayores costos, significaba tiempo perdido para poder tener acceso a los medicamentos, y por eso sucedía en nuestro país que cuando una persona enferma de influenza trataba de comprar un producto en una farmacia, en la farmacia de la esquina o la de cadena, o en cualquiera, no encontraba el medicamento.

A partir de la estrategia de liberación de genéricos introdujimos a nuestro país tres medicamentos genéricos que se producen en nuestro país y hoy tienen estos resultados, 51 por ciento menor.

Y ahora quiero entrar rápido a los beneficios en el sector público. Realizamos un análisis de todas las compras que se realizaron en el sector público y hemos estimado que los ahorros acumulados, generados precisamente por la compra de medicamentos genéricos ascienden a 26 mil 102 millones de pesos.

Y para qué sirve esto. Sin duda para que el sector público pueda comprar más medicamentos, para que haya mayor acceso a estos, y las personas que tratan de atender una enfermedad acudiendo a los servicios públicos de nuestro país, puedan tener rápidamente acceso a estos insumos para la salud.

Y quiero decirles además que esto ha implicado que también en esta administración, en seis años, el sector público haya incrementado el volumen de abasto para estas sustancias.

Hemos calculado que se ha pasado de 4.4 millones de unidades por mes a 24. 9 millones de unidades en ese mismo periodo, es decir, hemos incrementado 5.5 veces más el abasto de medicamentos en el sector público, y además esto también lo hemos hecho con un menor precio.

El costo promedio por unidad de estas sustancias es de 33.1 pesos por unidad, gracias a la entrada de medicamentos genéricos que ha ayudado a que el IMSS, el ISSSTE, CENSIDA y sin duda otros sistemas de salud, correspondiente a la Marina, el correspondiente a Secretaría de la Defensa Nacional, incluso, para las entidades federativas se haya reducido también en estos volúmenes.

Y este es un dato muy interesante porque refleja la evolución de los medicamentos genéricos en dos dimensiones. La primera dimensión relacionada con el valor, es decir, podemos ver en esta lámina, cómo en el 2010 el valor de los medicamentos genéricos en nuestro país alcanzaba el 29. 3 por ciento, hoy con la entrada de los medicamentos genéricos con esta estrategia del Gobierno de la República, el valor de los medicamentos genéricos es del 51.9 por ciento.

Pero además, comentarles también esta segunda gráfica, que es muy relevante, porque hoy ocho de cada 10 productos son medicamentos genéricos.

En el 2010, estábamos en un 54 por ciento de penetración de los medicamentos genéricos en términos de unidad. Y quiero reportarles, en la siguiente lámina cuál es el efecto, incluso, más importante que genera la estrategia de medicamentos genéricos, y eso se refiere al impacto que tiene en la reducción del gasto de bolsillo de los pacientes.

Los medicamentos genéricos han permitido que quienes se beneficien más de los precios reducidos de los medicamentos genéricos en competencia, sea el decil más bajo, en está lámina podemos observar cómo el decil más bajo en la reducción de precios ha obtenido el 60 por ciento de beneficios, es decir, el decil más bajo con ingresos más bajos, ha tenido un beneficio de 60 por ciento con la reducción de los medicamentos genéricos, cuando en el decil más alto la reducción el beneficio se encuentra en 34 por ciento.

Por tanto, esta es una estrategia, que no solamente aporta con mayores medicamentos, insumos de calidad, seguridad y eficacia, sino también está dirigida a las familias mexicanas. Está dirigida a que los pacientes puedan comprar medicamentos disponibles, accesibles a los mejores precios.

Y tengo un par de conclusiones para ustedes; la estrategia de medicamentos genéricos ha permitido en total que se hayan liberado 43 sustancias activas, 590 medicamentos genéricos, con un ahorro superior a los 26 mil millones de pesos para el sector público, con 70 por ciento de reducción en precios y además 70 por ciento de enfermedades vinculadas con estos medicamentos genéricos.

Y esto ha permitido que el Gobierno de la República haya tomado una decisión relevante para esta industria, la industria farmacéutica y de dispositivos médicos.

Quiero reportar a ustedes que el pasado 14 de junio, se hizo una declaratoria importante en el marco de la convención de la industria farmacéutica, el doctor José Narro Robles, Secretario de Salud Federal y el licenciado Ildefonso Guajardo, el Secretario de Economía, hicieron la declaratoria del sector farmacéutico y de dispositivos médicos como sector estratégico y prioritario para la economía mexicana.

Esto representa sin duda compromisos de la autoridad regulatoria, compromisos de la industria farmacéutica para seguir invirtiendo, para seguir trayendo a México los mejores medicamentos.

Compromisos éticos para cuidar la calidad, seguridad, eficacia de los productos y sin duda compromisos con los pacientes.

Este es uno de los resultados que en esta administración son destacables, precisamente por los efectos que tiene en tres dimensiones; primero para los precios, segundo para los pacientes y tercero para el sector público.

Muchas Gracias.