Si bien la estructura de esta norma se mantiene vigente, su actualización permite la reducción de requisitos reguladores que tenían un bajo impacto en la seguridad y por lo tanto a pesar de su eliminación, la seguridad radiológica en las instalaciones se mantiene desde la concepción de las instalaciones hasta su operación.
Por otra parte, y como parte fundamental de la modificación, la versión modificada establece que esta norma ya no aplica a las instalaciones de medicina nuclear, puesto que estas instalaciones tienen una norma específica que las regula, con esto se elimina la doble regulación existente hasta el momento de la entrada en vigor de la presente norma.
La norma entra en vigor a partir del 2 de octubre del presente, sustituyendo así a la antigua norma emitida en el año de 1996. Con esta actualización al marco normativo se asegura que el manejo de fuentes abiertas de radiación ionizante se lleva cabo con la mayor seguridad para la población, el ambiente y los trabajadores ocupacionalmente expuestos.
Para consultar la norma, haga click aquí.