La importancia de la conservación de los suelos es más que preservar las especies de flora y fauna, ya que permite procesos importantes de infiltración del agua de lluvia, con ello se recargan los mantos acuíferos y disminuyen los efectos de las inundaciones, así como la producción de alimentos.

Existen múltiples factores que intervienen en el desarrollo de las inundaciones, uno de ellos son los cambios en el uso de suelo dentro de las cuencas sin una adecuada planeación, generalmente para la agricultura, ganadería y en el aprovechamiento de los recursos forestales.

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Estudios indican que en México los suelos se pierden por erosión hídrica (56%), erosión eólica (28%), degradación química (12%) y degradación física (4%).

La deforestación acelera el proceso natural de erosión hídrica de los suelos, provocando que los escurrimientos y ríos arrastren las partículas de éstos con facilidad, las cuales son depositadas en zonas bajas o de poca pendiente. Por lo anterior, disminuye la capacidad de conducción de los ríos y, por lo tanto, se tendrán desbordamientos más frecuentes.

Por otra parte, existe una relación entre los cambios de usos de suelo y los volúmenes de escurrimiento dentro de una cuenca, indican que, al reducirse las zonas naturales aumentarán dichos volúmenes en las salidas de las cuencas, lo que podría ocasionar que obras de infraestructura como puentes o bordos, puedan ser rebasadas en su diseño en periodos cortos.

El cambio de uso de suelo y su conservación debe ser planificado, con base en el concepto de manejo integral de cuencas, asegurando el desarrollo sostenible de nuestras sociedades mediante una gestión racional y adecuada de los recursos naturales, particularmente del agua, suelo y vegetación. A nivel local, planificar el uso del suelo permitirá proteger áreas de captación, abastecer de agua a la comunidad y proteger sitios con frecuencia de inundaciones.

El Día Mundial del Suelo

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El Día Mundial del Suelo se celebra anualmente cada 5 de diciembre desde 2014, año en que la Organización de las Naciones Unidas (ONU) designó esta fecha como propuesta de la Organización de las Naciones Unidas de la Alimentación y la Agricultura, ONUAA, o más conocida como FAO.

Los orígenes de la idea se remontan a 2002 gracias al impulso de la Unión Internacional de Ciencias del Suelo (IUSS), la cual propuso este evento en el marco de la Alianza Mundial por el Suelo, un foro colaborativo surgido ante la necesidad de compartir experiencias sostenibles para recuperar un suelo que pensábamos era un recurso infinito.

Este año se pretende concientizar sobre la importancia de mantener ecosistemas saludables, que garanticen el bienestar humano con una gestión eficiente del terreno a través de la campaña: Mantengamos vivo el suelo, protejamos la biodiversidad del suelo.

Enlaces de utilidad:

http://www.fao.org/world-soil-day/es/

https://www.un.org/sustainabledevelopment/es/biodiversity/