• A nivel nacional, el programa Sembrando Vida plantará en esta Segunda Jornada de Siembra 429 millones 164 mil 551 árboles.

Con la plantación de 41 millones 427 mil 857 nuevos árboles maderables y frutales principalmente, Tabasco llegará durante la Segunda Jornada Nacional de Siembra “Desde el corazón de nuestra Tierra”, del programa Sembrando Vida, a 123 millones 953 mil 285 plantas, una cifra de reforestación sin precedentes en el estado.

En Tabasco, el Programa Sembrando Vida, de la Secretaría de Bienestar, ha dado empleo a 56 mil 979 sembradoras y sembradores de mil 659 localidades en 17 municipios, quienes forman parte de los más de 400 mil campesinas y campesinos que llevan a cabo la reforestación más importante de las últimas décadas en el estado y en el país.

Los cultivos más relevantes de árboles maderables en esta entidad son, en materia forestal: macuilis, cedro, caoba, tinto, tatuán; en frutales, plátano, guanábana, limón, cuajinicuil, chalahuite y coco, así como los agroindustriales cacao, achiote, café arábica, hule y pataste, y las especias pimienta, canela, árbol de canela y chicle.

De esta forma, Sembrando Vida no sólo genera empleo y arraigo a la tierra, sino también la igualdad con una creciente participación de mujeres en el programa y que, en Tabasco, llega a 21 mil 402 sembradoras (37.56%) frente a 35 mil 577 sembradores (62.44%), entre quienes se encuentran 326 (0.57%) de población indígena.

A nivel nacional, durante esta Segunda Jornada de Siembra se plantarán 429 millones 164 mil 551 árboles maderables y frutales, además de agroindustriales y especias, en las 20 entidades de la República donde las acciones del Programa Sembrando Vida recuperan el trabajo comunitario y combaten de manera directa las raíces de la migración.

En los 20 estados donde opera, Sembrando Vida cuenta con 420 mil 420 sembradoras y sembradores que han reforestado vastas regiones del país con una existencia, hasta antes de la Jornada Nacional de Siembra, de 363 millones 416 mil 364 plantas de árboles maderables, entre los que destacan cedro, macuilis, caoba, pino, ramón o capomo, y frutales como plátano, limón, aguacate y durazno.

Sembrando Vida no sólo promueve la reforestación como una vía para regenerar el medio ambiente y asegurar el rescate del campo mexicano, sino que también contribuye a la construcción de un patrimonio para el futuro de miles de indígenas y campesinos que antes encontraban en la migración la única alternativa para mejorar sus condiciones de vida