La mejor manera de conservar nuestras tradiciones es a través de su transmisión y recuperación generacional. Tal es el caso de una de las celebraciones más importantes en nuestro país, el Día de Muertos, declarada en 2008 por la UNESCO como Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad.
Desde Sembrando Vida se busca fomentar las costumbres que nos caracterizan como uno de los países con mayor riqueza cultural del mundo, como es dicha festividad, celebrada el 1 y 2 de noviembre.
En el marco de esta fiesta, el pasado 29 de octubre, en la cabecera municipal de Pantelhó, Chiapas, se realizó una demostración de altares con motivo de recordar a los seres más queridos por los integrantes de esta comunidad.
La tradición permitió la participación del personal operativo de las Comunidades de Aprendizaje Campesino (CAC), donde técnicos, sembradores y becarios colaboraron en la elaboración de las ofrendas, además de contar con el apoyo de la población que se dio cita en el lugar.
La actividad se ha replicado en distintos municipios donde tiene presencia el programa. Cada grupo tiene la oportunidad de detallar y exponer los elementos que conformaron los altares, entre los que destacaron alimentos cultivados por los productores de las CAC.
Entre el olor de copal, velas, sahumerios, comida típica y flores de cempasúchil como adorno, estos altares reflejaron los usos y costumbres de diferentes localidades en relación a esta festividad, así como la gran variedad de productos agrícolas propios de cada región y comunidad.
En el Día de Muertos, cada grupo étnico refuerza su identidad. Dentro de las creencias indígenas que tienen origen en el periodo prehispánico, se celebra el retorno de las ánimas o fieles difuntos, que vuelven en estas fechas para reencontrarse con sus seres queridos.
Los rituales que se realizan con motivo de esta celebración varían de acuerdo a las costumbres de cada localidad y, aunque se desconoce con exactitud desde cuándo se conmemora, existe el registro de civilizaciones como la mexica y maya, que honraban a sus muertos al final de la cosecha del maíz.
A través de Sembrando Vida, la Secretaría de Bienestar busca promover estas actividades con la finalidad de arraigar las costumbres mexicanas, además de propiciar el intercambio entre las Comunidades de Aprendizaje Campesino.