En el marco de la misión de cooperación entre la Agencia de Servicios a la Comercialización y Desarrollo de Mercados Agropecuarios (ASERCA) y la Compañía Nacional de Abastecimiento de Brasil (CONAB), se reunieron, el Representante de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), en México, Crispim Moreira; el Embajador de Brasil en México, Mauricio Carvalho Lyrio; el Presidente de la CONAB, Francisco Marcelo Rodrigues Bezerra; y el Director en Jefe de ASERCA; Alejandro Vázquez Salido.

El objetivo de esta reunión fue reforzar las capacidades técnicas en materia de apoyos a la comercialización, la administración de riesgos de precios así como el abastecimiento, almacenamiento y comercialización de granos, identificando áreas de oportunidad entre las dos instituciones más grandes de América Latina y el Caribe.

La CONAB busca conocer el proceso de diseño y formulación de instrumentos de administración de riesgos de precios, que el gobierno federal por medio de ASERCA ha impulsado por más de veinte años. Lo que ha permitido proteger el ingreso esperado de los productores y comercializadores de productos agropecuarios, disminuyendo el riesgo frente a fluctuaciones adversas en los precios internacionales.

Francisco Marcelo Rodrigues Bezerra, Presidente de la CONAB, expuso que Brasil ha venido aumentando su participación en el mercado mundial de granos, por lo que ha sido necesario implementar las mejores técnicas de almacenaje, políticas de comercialización y las estrategias de producción y exportación.

Para el Director en Jefe de ASERCA, Alejandro Vázquez Salido, la reunión cobra singular importancia, para conocer los modelos de almacenamiento y mecanismo de regulación y certificación implementados por la CONAB, considerando que en los dos últimos años se ha estado trabajando en conjunto con el Banco Mundial para el impulso del almacenamiento, el desarrollo de las capacidades para su operación y manejo de calidad de los granos, la vinculación comercial y búsqueda de nuevos mercados para los maíces mexicanos, así como el desarrollo de una plataforma nacional de información del mercado de granos.

Este ejercicio de diálogo e intercambio de experiencias, permite fortalecer las capacidades de ambas instituciones, facilitar el establecimiento de alianzas y desarrollar estrategias conjuntas de acción y proyectos de cooperación técnica para reforzar la seguridad alimentaria de ambos países.