Diseñar y establecer un mecanismo integral de aseguramiento frente a los riesgos climáticos y de mercado, que comprenda los diferentes eslabones de la cadena de valor, desde la producción hasta la comercialización, fomentando la inclusión financiera y la gestión eficiente de riesgos ha sido el compromiso de la presente administración. Dentro del 6º Informe de gobierno del presidente Enrique Peña Nieto, se destacó los avances de aseguramiento en el sector agropecuario a lo largo de estos 6 años.

En 2018 el Componente de Atención a Siniestros Agropecuarios registra un presupuesto de 3,866.6 millones de pesos. En la presente administración se incrementó en 265% el presupuesto asignado a este componente en comparación con el sexenio anterior, al pasar de 3,232.9 millones de pesos a 3,866.6 millones de pesos. Con dicho presupuesto, se dio protección a 11.8 millones de hectáreas, y se aseguraron 36.3 millones de unidades animal, para protegerlas contra daños en agostaderos y floración (en el caso de la apicultura) en las 32 entidades federativas.

Con la participación directa de los productores, en este sexenio, se logró la cobertura universal en la ganadería:

I. Protección para todo el inventario ganadero nacional, 38 millones de unidades animal, de las especies bovina, ovina, caprina y abejas.

II. Protección universal en infraestructura pecuaria, con más de 1 millón de bienes registrados en el Padrón Ganadero Nacional, que se derivan por la incidencia de desastres naturales.

Asimismo, se autorizaron recursos para el aseguramiento de 2,925 embarcaciones y 548,626 metros cuadrados de acuacultura.

En este mismo periodo, se alcanzó el aseguramiento de 717,516 productores agropecuarios de manera integral, es decir, el aseguramiento del propio productor. De esta manera durante los seis años de esta administración, en el sector Agrícola se incrementó 90.2% la cobertura de aseguramiento con los gobiernos estatales, al pasar de 6.1 millones de hectáreas a 11.6 millones de hectáreas con protección ante la ocurrencia de desastres naturales. Los beneficiarios se incrementaron en 46.2%, al pasar de 1.3 millones de agricultores, protegidos en 2011, a 1.9 millones de agricultores en 2018.