La producción alimentaria a nivel mundial podría verse afectada por una preocupante disminución de la población de animales polinizadores, según ha señalado recientemente la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO, por sus siglas en inglés).

De acuerdo con este organismo internacional, cerca del 35 por ciento de las especies de polinizadores invertebrados, como abejas y mariposas, se encuentran en peligro de extinción por causa de prácticas agrícolas intensivas, el uso de plaguicidas y los efectos del cambio climático.

Más del 75 por ciento de los cultivos alimentarios en el mundo dependen en cierta medida de la polinización, por lo que la disminución de la población de abejas y otros polinizadores podría afectar la producción de distintas variedades de frutas, hortalizas, semillas, frutos secos y aceites, detalló la FAO.

Subraya que la disminución de la población de animales polinizadores podría tener repercusiones económicas sobre el sector agrario, ya que cerca de dos mil millones de pequeños productores en todo el mundo se ayudaron de la gestión de la actividad de abejas y otros polinizadores para mejorar sus rendimientos agrícolas en una media del 24 por ciento.

En México, la Federación Mexicana de Apicultores estima que anualmente mueren alrededor de 14,000 millones de abejas como resultado directo de la aplicación de agroquímicos y de la expansión de las zonas urbanas. De acuerdo a esta organización, los estados más afectados han sido Jalisco, Durango, Coahuila, Chihuahua, San Luis Potosí, Zacatecas, Puebla, Guerrero y distintas regiones de la Península de Yucatán.

La disminución de las poblaciones de abejas se ha hecho notar en el ámbito nacional; el Servicio de Información Agroalimentaria y Pesquero (SIAP) ha señalado que desde 2012 la producción de miel se ha reducido en un 12 por ciento, llegando a haber estados donde esta reducción oscila el 50 por ciento.

Por lo anterior, la FAO en conjunto con la Plataforma Intergubernamental sobre Diversidad Biológica (IPBES, por sus siglas en inglés), promoverán acciones coordinadas en todo el mundo para salvaguardar a los polinizadores y fomentar el uso sostenible de las actividades de polinización de insectos y otros animales.