Cuando hablamos de antojitos mexicanos nos vienen a la mente un sinfín de platillos como los tacos, los tamales y las quesadillas; pero el día de hoy vamos a hablar de los deliciosos sopes.

Los sopes tienen su origen en las culturas prehispánicas que habitaban la zona centro y sur de nuestro país; con el paso del tiempo, este platillo se extendió a lo largo del país y obtuvo su reconocimiento como una de las garnachas favoritas de los mexicanos.

Como cada alimento, dependiendo del lugar en donde se prepare, la receta varía un poco; por ejemplo, en Nayarit las tortillas se pasan por una salsa de chile ancho y aceite, y se rellenan con frijoles, papa, lechuga rebanada, cebolla, queso, rabanitos y salsa de jitomate; por otro lado, en Nayarit son típicos los sopes de ostión.

Es tan variada la manera de prepararlos que encontramos sopes fuera de lo común, entre ellas encontramos sopes vegetarianos, dulces, e incluso ¡en forma de corazón! Estos últimos se crearon en la Ciudad de México por un restaurante para celebrar el Día del amor y la amistad.

No cabe duda que la mezcla entre el ingenio mexicano y la gastronomía nos ofrece platillos creativos y deliciosos que nos permiten demostrar el amor que sentimos, ya sea a una persona o a la comida.