¿Cuál es cuál? Bueno, primero vamos a conocer un poco sobre ellas:

El cilantro (Coriandrum sativum) es proveniente del norte de África, y el perejil (Petroselinum sativum) de la zona del mar Mediterráneo. Se introdujeron al gusto culinario de México a través de los colonizadores españoles en el siglo XVI.

Ambas son hierbas aromáticas que pertenecen a la familia de las apiáceas, por eso se parecen, ambas son ricas en antioxidantes.

  • El cilantro tiene propiedades antibacterianas y antimicrobianas, es alto en hierro, magnesio y fibra.
  • El perejil contiene altos niveles de ácido fólico y vitaminas A, C y K.

Las dos se consumen crudas, principalmente, por ello hay que lavarlas adecuadamente y desinfectarlas.

Ahora sí, vamos a diferenciarlas:

  1. Observa bien sus hojas… las del cilantro terminan en puntas redondeadas, mientras que las del perejil son puntiagudas.
  2. El color es distinto, el perejil es de un verde más intenso que el cilantro, míralas bien… se nota ¿o no?
  3. ¿Ya los identificaste por lo anterior? Ahora huélelos, el olor es la manera más rápida para diferenciarlos, luego… jamás podrás confundirlos.
  4. Una diferencia más por si las dudas: el cilantro siempre lo encontrarás con raíz.

No olvides condimentar tus comidas con cilantro y perejil, para resaltar los sabores, además te ayudarán a tener buena digestión.

Tip: Para que goces siempre del sabor fresco del cilantro y el perejil, puedes hacerlos parte de tu huerto familiar, son muy fáciles de cultivar.

México produce más de 132 mil toneladas de cilantro y 12 mil toneladas de perejil.